miércoles, 11 de febrero de 2009

LOS ANTIGUOS MASONES Y SU SISTEMA DE ENSEÑANZA


Los antiguos masones desarrollaron un muy complejo sistema de enseñanzas, con mensajes encriptados dentro de las tres primeras liturgias, las cuales deben ser estudiadas minuciosamente, leídas y releídas una y otra vez, meditadas y practicadas con mucha frecuencia. Los grados supra masónicos de 4° al 33° no son sino redundancias de estos tres primeros grados-donde si
> mplemente se hace referencia a estas tres primeras liturgias. Las liturgias de los grados de aprendiz, compañero y
> maestro masón, son susceptibles de ser entendidas a diversos niveles; desde el metafísico cosmológico, desde lo político y social al puramente personal que apunta a la realización espiritual del adepto. Es lo que ocurre, por ejemplo, con aquellas partes de las liturgias en que habla de una piedra lista a transmutar. El lector profano que lea las liturgias seguramente no podrá interpretarlas debidamente, y son los años de apegada labor masónica las que pueden captar el secreto masónico que ahí se guarda. El masón habrá de tener presente siempre que el lenguaje litúrgico masónico ha de entenderse también en sentido simbólico con una alusión al ser humano no como es sino como debería llegar a ser. Los masones en la liturgia, al sociabilizar en su pequeño taller masónico debe entenderse son concebidos como en un pequeño reino o un estado pequeño ( un cosmos a pequeña escala ), de la misma forma que se puede concebir el mismo sistema para adaptarlo a una Nación, y así al Mundo Entero. Una forma de enfocar las cosas que en nuestro contexto tiene uno de los más preclaros ejemplos en Platón, con su teoría del alma como "Estado Interior" o "República en pequeño" que refleja las condiciones que imperan en la República o el Estado Nación dentro de la cual vive. La Gran Nación Masónica con la que tanta frecuencia se hace referencia dentro de los Templos se refiere a esa Nación que no conoce límites fronterizos, ni diferencias raciales mucho menos, diferencias religiosas o políticas. Además la liturgia habla del gobierno de una Logia, de uno mismo al controlar sus pasiones, a la recta forma de organizar y disciplinar la propia vida con vistas a conseguir la felicidad y la realización espiritual. Sólo queda animar al lector sea o no masón a que penetre en este mundo fascinante de la Sabiduría Oculta Masónica haciendo a un lado sus perjuicios, falsos clichés mentales o ideas preconcebidas, dejándose guiar por las sabías enseñanzas francmasónicas. Si así lo hace usted, si se deja llevar por la corriente viva y verdades que forma el Secreto Masónico, no se verá defraudado y recogerá frutos para usted que me lee insospechados.

VICENTE ALCOSERI