sábado, 5 de marzo de 2016

LA R:.L:.S:.PARTHENON N°1 DEL GRAN ORIENTE DEL PERU INVITA A LA CEREMONIA DE INSTALACION DEL V:.M:. ELECTO R:.H:. EDMUNDO ALOSILLA NUÑEZ

PARTHENON

LA R:.L:.S:.PARTHENON N°1 DEL GRAN ORIENTE DEL PERU INVITA A LA CEREMONIA DE INSTALACION DEL V:.M:. ELECTO R:.H:. EDMUNDO ALOSILLA NUÑEZ

El verdadero origen de la Navidad



El verdadero origen de la Navidad


¿Dónde se originó la costumbre de celebrar la Navidad? ¿Tiene su fundamento en la Biblia o en el paganismo? ¡En este folleto se revelan algunas verdades sorprendentes! ¿Conoce usted el origen del árbol de Navidad, de “Papá Noel” y del intercambio de aguinaldos?

ERA NOCHE BUENA. Los niños habían hecho el pesebre y esperaban ansiosos la venida de Papá Noel cargado de regalos. Al amanecer del día 25 de diciembre encontraron una gran cantidad de paquetes con juguetes y dulces debajo de un flamante árbol de Navidad. Sus padres les aseguraban que todo aquello lo había traído Papá Noel durante la noche mientras ellos dormían.



¿Acaso dudaban los niños de lo que sus padres les decían? ¡Claro que no! Lo daban por hecho. ¿A usted no le sucedió lo mismo?



Muy pocos se han detenido a pensar por qué creen lo que creen, por qué observan determinadas costumbres. La mayoría de nosotros aprendimos a aceptar todo sin vacilar.

¿Por qué sucede esto? ¿Por instinto ovejuno? No exactamente.

Por naturaleza tenemos la tendencia a hacer lo mismo que hacen los demás… aunque estén equivocados. Las ovejas siguen el rebaño hasta el degolladero. Pero los humanos debemos fijarnos hacia dónde vamos.

¿Cuál fue el origen de la Navidad?

¿Es la Navidad realmente la celebración del nacimiento de Jesucristo? ¿Nació Jesús un 25 de diciembre?

Los apóstoles originales, quienes conocieron a Jesús personalmente y fueron instruidos por Él, ¿celebraban su cumpleaños el 25 de diciembre? ¿La idea se les ocurrió alguna vez? Si la Navidad es la festividad más importante del cristianismo, ¿por qué tantas personas que no son cristianas la observan? ¿Lo sabe usted?

¿Por qué es época de intercambiar regalos con nuestros parientes y amistades? ¿Tiene esta costumbre su origen en los magos quienes le presentaron obsequios al niño Jesús? Las respuestas nos pueden sorprender.

La mayoría de las personas “suponen” muchas cosas acerca de la Navidad… cosas que realmente no son ciertas. Pero no supongamos nada, sino que busquemos los hechos.

Lo que dicen las enciclopedias

La palabra “navidad” es una contracción de “natividad”, que significa natalicio. Esta fiesta hizo su aparición en la Iglesia Católica y de allí se extendió al protestantismo y al resto del mundo.

Ahora bien, ¿de dónde la recibió la Iglesia Católica? No fue de las enseñanzas del Nuevo Testamento. No fue de la Biblia ni de los apóstoles quienes habían sido instruidos personalmente por Jesucristo. La Navidad se introdujo en la Iglesia durante el siglo cuarto, proveniente del paganismo.

Puesto que la celebración de la Navidad fue introducida en el mundo por la Iglesia Católica Romana y no tiene otra autoridad que la de ella misma, veamos lo que dice al respecto la Enciclopedia Católica (edición de 1.911):

“La Navidad no estaba incluida entre las primeras festividades de la Iglesia… los primeros indicios de ella provienen de Egipto… Las costumbres paganas relacionadas con el principio de enero se centraron en la fiesta de la Navidad”.

En la misma enciclopedia, bajo “Día Natal”, encontramos que Orígenes, uno de los padres de la Iglesia, reconoció la siguiente verdad: “…No vemos en las escrituras que nadie haya guardado una fiesta ni celebrado un gran banquete el día de su natalicio. Sólo los pecadores [como Faraón y Herodes] celebraban con gran regocijo el día en que nacieron en este mundo”.

La Encyclœpedia Britannica, edición de 1.946, dice: “La Navidad no se contaba entre las antiguas festividades de la Iglesia…” No fue instituida por Jesucristo ni por los apóstoles, ni por autoridad bíblica. Fue tomada más tarde del paganismo.

La Enciclopedia Americana, edición de 1.944, dice: “La Navidad… de acuerdo con muchas autoridades no se celebró en los primeros siglos de la Iglesia Cristiana, ya que la costumbre del cristianismo en general era celebrar no el natalicio sino la muerte de personas importantes. [La “Comunión”, o mejor dicho, la Pascua, instituida por autoridad bíblica en el Nuevo Testamento, es una conmemoración de la muerte de Cristo.]… En memoria de este acontecimiento [el nacimiento de Cristo] se instituyó una fiesta en elsiglo cuarto. En el siglo quinto, la Iglesia Occidental dio orden de que fuese celebrada para siempre, en el mismo día de la antigua festividad romana en honor del nacimiento del Sol, ya que no se conocía la fecha exacta del nacimiento de Cristo”.

Tomemos nota de este hecho importante: Estas autoridades históricas demuestran que durante los primeros dos o tres siglos de nuestra era los cristianos no celebraban la Navidad. Esta fiesta fue introducida en la Iglesia Romana en el siglo cuarto de nuestra era ¡y no fue hasta el siglo quinto que se estableció como fiesta oficialmente cristiana!

Jesús no nació un 25 de diciembre

¡Jesucristo ni siquiera nació en la época del año en que ahora se observa la Navidad! Cuando Él nació, “había pastores en la misma región, que velaban y guardaban las vigilias de la noche sobre su rebaño” (Lucas 2.8). Esto jamás pudo haber acontecido en Judea en el mes de diciembre. Los pastores traían sus rebaños de los campos y los encerraban a más tardar a mediados de octubre para protegerlos de la estación fría y lluviosa que se acercaba. La Biblia misma prueba, en Cantares 2.11 y Esdras 10.9, 13, que el invierno era época de lluvias, lo cual hacía imposible que los pastores permanecieran de noche en el campo con sus rebaños.

“Era una antigua costumbre de los judíos de aquellos tiempos sacar sus rebaños a los campos y desiertos alrededor de la Pascua (a principios de la primavera) y traerlos nuevamente a casa al comenzar las primeras lluvias” (Adam Clarke Commentary,Comentario de Adán Clarke, volumen 5, página 370).


El mismo comentarista declara: “Los pastores vigilaban sus rebaños día y noche mientras permanecían fuera. Puesto que la primera lluvia caía a principios del mes de chesvan,que corresponde a parte de los meses de octubre y noviembre [comienza en octubre], vemos que los rebaños permanecían en el campo todo el verano. Ahora bien, según el relato bíblico los pastores todavía no habían recogido sus rebaños, lo que hace suponer que el mes de octubre no había comenzado aún y que, por lo tanto, nuestro Señor no nació un 25 de diciembre, cuando no había rebaños en los campos. No pudo haber nacido después del mes de septiembre, ya que los rebaños aún estaban en el campo denoche. Con esto, debemos descartar la natividad en diciembre. El pastoreo nocturno de los rebaños en los campos es un hecho cronológico.”

Cualquier enciclopedia u otra autoridad nos puede confirmar el hecho de que Cristo no nació un 25 de diciembre. La Enciclopedia Católica lo dice claramente.

La fecha exacta del nacimiento de Jesucristo es totalmente desconocida. Esto lo reconocen todas las autoridades. La falta de espacio en esta publicación nos impide mostrar las escrituras que indican que este acontecimiento sucedió a principios de otoño, posiblemente en el mes de septiembre, alrededor de seis meses después de la Pascua.

Si Dios hubiera querido que guardáramos y celebráramos el cumpleaños de Jesucristo, no habría ocultado la fecha.

¿Cómo se introdujo en la Iglesia?

¿Cómo pudo esta fiesta pagana introducirse en el mundo cristiano occidental?

The New Schaff-Herzog Encyclopedia of Religious Knowledge (La nueva enciclopedia de conocimiento religioso, de Schaff-Herzog) lo explica claramente en su artículo sobre la Navidad: “No puede determinarse con precisión… hasta qué punto la fecha de esta festividad dependió de la pagana Brumalia (25 de diciembre), que seguía a la Saturnalia (17-24 de diciembre) y conmemoraba el día más corto del año y el nuevo Sol. Las festividades paganas de Saturnalia y Brumalia estaban demasiado arraigadas en las costumbres populares para ser suprimidas por la influencia cristiana… La festividad pagana, con su alboroto y jolgorio, gustaba tanto que los cristianos vieron con agrado una excusa para continuar celebrándola sin mayores cambios en el espíritu y la forma de su observancia. Predicadores cristianos de Occidente y del Oriente Cercano protestaron contra la frivolidad indecorosa con que se celebraba el nacimiento de Cristo, mientras los cristianos de Mesopotamia acusaban a sus hermanos occidentales de idolatría y de culto al Sol por aceptar como cristiana esta festividad pagana”.

Recuérdese que el mundo romano había sido pagano. Antes del siglo cuarto los cristianos eran pocos, aunque su número iba en aumento, y eran perseguidos por el gobierno y los paganos. Pero con el advenimiento del emperador Constantino quien en el siglo cuarto se declaró cristiano y elevó al cristianismo a un nivel de igualdad con el paganismo, el mundo romano comenzó a aceptar este cristianismo popularizado y los nuevos adeptos sumaron centenares de millares.


Tengamos en cuenta que esta gente había sido educada en las costumbres paganas, siendo la principal aquella fiesta idólatra del 25 de diciembre. Era una fiesta de alegría y gozaba de un espíritu especial. ¡Le gustaba al pueblo! ¡No querían suprimirla! El artículo ya citado de The New Schaff-Herzog Encyclopedia of Religious Knowledge explica cómo el reconocimiento del día domingo por parte de Constantino, día en que antes los paganos adoraban al Sol, y cómo la influencia del maniqueísmo pagano, que identificaba al Hijo de Dios con el Sol, dieron motivo a estos paganos del siglo cuarto, ahora convertidos en masa al cristianismo, para acomodarle a su fiesta pagana del 25 de diciembre (día del nacimiento del dios Sol) el título de día del nacimiento del Hijo de Dios.

¡Así fue como la “Navidad” se introdujo en nuestro mundo occidental! Aunque le demos otro nombre, sigue siendo la misma fiesta pagana de culto al Sol. Sólo ha cambiado el nombre. Podemos llamar “león” a una liebre, mas no por esto deja de ser liebre. LaEncyclœpedia Britannica dice: “A partir del año 354 algunos latinos pudieron haber trasladado la fecha del 6 de enero al 25 de diciembre, la cual era entonces una fiesta mitraica… o cumpleaños del invencible Sol… Los sirios y los armenios, aferrándose a la fecha del 6 de enero, acusaban a los romanos de idólatras y adoradores del Sol, sosteniendo… que la fiesta del 25 de diciembre había sido inventada por los discípulos de Cerinto…”

El verdadero origen de la Navidad

Hemos visto, pues, que la Navidad llegó al mundo por medio de la Iglesia Católica y que ella la recibió del paganismo. Ahora bien, ¿de donde la sacaron los paganos? ¿Cuál fue su verdadero origen?

La Navidad es una de las principales tradiciones del sistema corrupto llamado Babilonia, y como tal es censurado en las profecías y enseñanzas bíblicas. ¡Tiene sus raíces en la antigua Babilonia de Nimrod! Sí. ¡data de la época inmediatamente posterior al diluvio!

Nimrod, nieto de Cam, hijo de Noé, fue el verdadero fundador del sistema babilónico, sistema de la competencia organizada, de imperios y gobiernos humanos, del sistema económico del lucro, el cual se ha apoderado del mundo desde entonces. Nimrod construyó la torre de Babel, la Babilonia original, Nínive y muchas otras ciudades. Organizó el primer reino de este mundo. El nombre Nimrod se deriva de la voz hebreamarad que significa “rebelar”.


De escritos antiguos aprendemos que fue este hombre quien comenzó la gran apostasía mundial organizada que ha dominado al mundo desde tiempos inmemoriales hasta ahora. Nimrod era tan perverso que se dice se casó con su propia madre cuyo nombre era Semíramis. Muerto prematuramente, su llamada madre-esposa, Semíramis, propagó la perversa doctrina de la supervivencia de Nimrod como ser espiritual. Sostenía que de la noche a la mañana un gran árbol (tipo siempre verde) surgió de una cepa muerta, lo cual simbolizaba el nacimiento de Nimrod a una nueva vida. Ella declaró que en cada aniversario de su natalicio Nimrod dejaría regalos en el árbol. La fecha de su nacimiento era el 25 de diciembre. He aquí el verdadero origen del árbol de Navidad.

Con tramas e intrigas Semíramis se convirtió en la “reina del cielo” babilónica, y Nimrod, bajo diversos nombres, se convirtió en el “divino hijo del cielo”. Después de varias generaciones de esta adoración idólatra, Nimrod también se tornó en el falso mesías hijo de Baal, el dios Sol. En este falso sistema babilónico “la madre y el hijo” (Semíramis y Nimrod nacido nuevamente) se convirtieron en los principales objetos de adoración. Esta veneración de “la madre y el hijo” se extendió por todo el mundo, con variación de nombres según los países y las lenguas. Por sorprendente que parezca, encontramos el equivalente de la Madona ¡mucho antes del nacimiento de Jesucristo!



Así fue como en los siglos cuarto y quinto, mientras los paganos del mundo romano se convertían en masa al “cristianismo” llevando consigo sus antiguas creencias y costumbres paganas y disimulándolas bajo nombres cristianos, se popularizó también la idea de “la madre y el hijo”, especialmente en época de Navidad. Las tarjetas de Navidad, los villancicos y las escenas del pesebre reflejan este mismo tema.

Quienes fuimos criados en este mundo babilónico, quienes hemos escuchado y aceptado estas cosas durante toda la vida, hemos aprendido a venerarlas como algo sagrado. Jamás dudamos. Jamás nos detuvimos a investigar si estas costumbres tenían su origen en la Biblia o en la idolatría pagana.

Nos asombramos al conocer la verdad y, desgraciadamente, hay quienes se ofenden ante la verdad escueta. Pero Dios ordena a sus ministros fieles: “Clama a voz en cuello, no te detengas; alza tu voz como trompeta y anuncia a mi pueblo su rebelión” (Isaías 58.1). Increíble como parezca, estos son hechos reales en la historia y en la Biblia.

El verdadero origen de la Navidad está en la antigua Babilonia. ¡Está envuelto en la apostasía organizada que ha mantenido engañado al mundo desde hace muchos siglos! En Egipto siempre se creyó que el hijo de Isis (nombre egipcio de la “reina del cielo”) nació un 25 de diciembre. Los paganos en todo el mundo conocido celebraron esta fecha siglos antes del nacimiento de Jesucristo.

Jesús el verdadero Mesías, no nació un 25 de diciembre. Los apóstoles y la Iglesia primitiva jamás celebraron el natalicio de Cristo en esa fecha ni en ninguna otra. No existe en la Biblia mandato ni instrucción alguna para hacerlo. Pero sí existe el mandato de observar, no festejar, la fecha de su muerte (1 Corintios 11.24-26; Juan 13.14-17).

Así fue como los “misterios caldeos”, inventados por la esposa de Nimrod nos fueron legados – con nuevos nombres cristianos – por las religiones paganas.

Otras costumbres paganas

Además de las tradicionales costumbres navideñas de nuestros pueblos, hemos adoptado otras que con ser de origen pagano logran una acogida entusiasta. La “flor de Navidad” y el madero que se enciende en la chimenea son “vestigios de épocas precristianas”, según la Enciclopedia Americana. La corona verde o guirnalda que adorna las puertas de tantos hogares es igualmente pagana. De ella dice Frederick J. Haskins en su libroAnswers to Questions (Respuestas a algunas preguntas): “Se remonta a las costumbres paganas de adornar edificios y lugares de adoración para la festividad que se celebraba al mismo tiempo de la Navidad. El árbol de Navidad viene de Egipto y su origen es anterior a la era cristiana”.

Aun las velas, símbolo tradicional de la Navidad, son una vieja costumbre pagana, pues se encendían al ocaso para reanimar al dios Sol cuando éste se extinguía para darle paso a la noche.

También el Papá Noel

“Papá Noel”, o “Santa Claus”, es el mismo “San Nicolás”, obispo católico del siglo quinto. La Encyclœpedia Britannica, edición 11, volumen 19, páginas 648-649, dice: “San Nicolás, obispo de Mira santo venerado por los griegos y los latinos el 6 de diciembre… Se dice que una leyenda según la cual regalaba clandestinamente dotes a las tres hijas de un ciudadano pobre… dio origen a la costumbre de obsequiar regalos en secreto la víspera del día de San Nicolás [6 de diciembre], fecha que después se cambió al día de Navidad. De allí la asociación de la Navidad con Santa Claus…”

Los padres castigan a sus niños por decir mentiras pero al llegar la Navidad ¡ellos mismos se encargan de contarles la mentira de “Papá Noel”, los “Reyes Magos” o del “Niño Dios” !Entonces, ¿por qué nos extraña que al llegar a la edad adulta también crean que Dios es un mito?

Cierto niño, sintiéndose tristemente desilusionado al conocer la verdad, le comentó a un amiguito: “Sí, ¡y también me voy a informar acerca del tal Jesucristo!”

¿Es cristiano enseñarles a los niños mitos y mentiras? Dios dice “No engañaréis ni mentiréis el uno al otro” (Levítico 19.11). Aunque a la mente humana le parezca bien y lo justifique, Dios también dice: “Hay camino que al hombre le parece derecho; pero su fin es camino de muerte”.

Estudiados los hechos, pues, vemos con asombro que la costumbre de celebrar la Navidad en realidad no es costumbre cristiana sino pagana ¡Ello constituye uno de los caminos de Babilonia en que el mundo ha caído!

¿Es bíblico el intercambio de regalos?

Para algunas personas este es el punto más importante de todo lo que se refiere a la observancia de la Navidad: la época de comprar e intercambiar regalos. Al respecto muchos exclamarán triunfalmente: “¡Para esto sí tenemos autorización bíblica! ¿Acaso Jesucristo al nacer no recibió regalos de los magos?”

Nuevamente la verdad nos ha de sorprender. Primero, veamos el origen histórico de la costumbre de dar aguinaldos para después ver lo que nos dice la Biblia al respecto.

Citamos lo siguiente de la Bibliotheca Sacra, volumen 12, páginas 153-155: “El intercambio de regalos entre amigos es característico tanto de la Navidad como de la Saturnalia y los cristianos seguramente lo tomaron de los paganos, como lo demuestra con claridad la amonestación de Tertuliano”.


La verdad es que la costumbre de intercambiar regalos con amigos y parientes durante la época navideña, ¡no tiene absolutamente nada que ver con el cristianismo! Aunque nos parezca extraño. ¡ello no celebra el nacimiento de Jesucristo ni lo honra a Él! Supongamos que alguna persona que usted estima está celebrando su cumpleaños. ¿La honraría usted comprando cantidades de regalos para todos los demás parientes y amigos; haciendo caso omiso de la persona a quien desea honrar? ¿No le parece absurdo desde este punto de vista?

Sin embargo, esto es precisamente lo que hace la gente en todo el mundo. Observan un día en que Cristo no nació, gastando todo el dinero que logran reunir para obsequiar regalos a sus parientes y amigos. Pero años de experiencia nos enseñan que los cristianos profesos suelen olvidarse de dar algo a Cristo y a su Obra en el mes de diciembre. Este suele ser el mes en que más sufre la Obra de Dios. Aparentemente la gente está tan ocupada intercambiando aguinaldos que no se acuerdan de Cristo ni de su Obra. Después, durante enero y aun febrero, tratan de recuperar todo lo que gastaron en Navidad, de modo que muchos, en lo que se refiere al apoyo que dan a Cristo y su Obra, no vuelven a la normalidad hasta marzo.

Veamos lo que dice la Biblia en Mateo 2.1, 11 respecto a los regalos que llevaron los magos cuando nació Jesucristo. “Cuando Jesús nació en Belén de Judea en días del rey Herodes, vinieron del oriente a Jerusalén unos magos, diciendo: ¿Dónde está el rey de los judíos, que ha nacido?… Y al entrar en la casa, vieron al niño con su madre María, y postrándose, lo adoraron; y abriendo sus tesoros, le ofrecieron presentes: oro, incienso y mirra”.

¿Por qué le llevaron regalos a Cristo?

Notemos que los magos preguntaron por el niño Jesús, nacido rey de los judíos. Pero, ¿por qué le llevaron regalos? ¿Por ser su cumpleaños? ¡De ninguna manera!, ya que ellos llegaron varios días o semanas después de su nacimiento. Entonces, ¿lo hicieron para darnos ejemplo? ¡No! Tomemos nota. Ellos no intercambiaron regalos; más bien “le ofrecieron presentes” a Él, a Cristo. ¡No intercambiaron regalos con sus amigos y familiares, ni entre ellos mismos!

¿Por qué? El mencionado comentario bíblico de Adán Clarke, volumen 5, página 46, dice: “Versículo 11. (Le ofrecieron presentes.) En el Oriente no se acostumbra entrar a la presencia de reyes y grandes personajes con las manos vacías. Esta costumbre es señalada con frecuencia en el Antiguo Testamento y aún persiste en el Oriente y en algunas islas… del Pacífico Sur”.


¡Ahí está! ¡Los magos no estaban instituyendo una nueva costumbre cristiana de intercambiar regalos para honrar el nacimiento de Jesucristo! Actuaron de acuerdo con una antigua costumbre oriental que consistía en llevar regalos al presentarse ante un rey. Ellos llegaron en persona ante la presencia del Rey de los judíos. Por tanto llevaron obsequios de la manera que lo llevó la reina de Sabá a Salomón y así como hoy los llevan quienes visitan a un jefe de estado.

La costumbre de dar aguinaldos no tiene nada que ver con este acontecimiento; más bien es la continuación de una antigua costumbre pagana. En vez de honrar a Cristo, lo que hace es atrasar su Obra cada año en la época navideña.

¿Honra a Cristo realmente?

Ahora veamos un argumento utilizado con frecuencia para justificar la observancia de la Navidad.

Hay quienes insisten en que a pesar de tener sus raíces en una costumbre pagana, ahora no se observa la Navidad para honrar a un falso dios, el dios Sol, sino para honrar a Jesucristo.

¿Que nos dice la palabra de Dios al respecto? “No caigas en la trampa detrás de ellos [los pueblos paganos] no consultes a sus dioses ni averigües como les daban culto dichos pueblos, para hacer tú lo mismo. Tú no harás lo mismo con el Señor, tu Dios, porque ellos hacían a sus dioses cosas que detesta y abomina el Señor” (Deuteronomio 12.30-31,Nueva Biblia Española).

Asimismo, el profeta Jeremías nos advierte con respecto a las costumbres tradicionales de la sociedad que nos rodea: “Dice el Señor: No imitéis la conducta de los paganos… Los ritos de esos pueblos son falsos” (Jeremías 10.2-3, Nueva Biblia Española).

Dios nos dice claramente en su manual de instrucciones para nosotros – la Biblia – que no aceptará esta clase de culto aunque sea con la intención de honrarlo a Él. Nos dice que eso es abominable y por tanto no lo honra a Él sino a los falsos dioses paganos. Dios no quiere que lo honremos “como nos dicte nuestra propia conciencia”. Jesucristo dijo claramente: “Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren” (Juan 4.24). ¿Qué es verdad? El mismo Jesús dijo que su Palabra, la Santa Biblia, es verdad. (Juan 17.17). La Biblia dice que Dios no aceptará el culto de personas que, queriendo honrar a Cristo, adopten una costumbre pagana.

De nuevo, Jesús dijo: “Pues en vano me honran, enseñando como doctrinas,mandamientos de hombres” (Mateo 15.9). La observancia de la Navidad es unmandamiento de hombres y esto lo ha prohibido Dios. Jesucristo dijo además: “Así habéis invalidado el mandamiento de Dios por vuestra tradición” (Mateo 15.6).

Esto es precisamente lo que hacen hoy millones de personas. Desechan el mandamiento de Dios. Su mandamiento con respecto a la celebración de costumbres paganas para honrar o adorar a Dios es clarísimo: “Tú no harás lo mismo con el Señor, tu Dios”. Sin embargo, la mayoría de la personas toman a la ligera este mandamiento y lo invalidan siguiendo la tradición de los hombres al observar la Navidad.

¡No nos equivoquemos! Dios nos permite desobedecer. Nos permite seguir las costumbres de los hombres. Nos permite pecar. Pero también nos advierte que habrá un día de juicio en el que ¡segaremos lo que hayamos sembrado! Jesucristo fue la Palabraviviente y personal de Dios, y la Biblia es la Palabra de Dios escrita. ¡Por esas palabras seremos juzgados para toda la eternidad! No debemos hacer caso omiso de ellas ni tomarlas a la ligera.

Estamos en Babilonia sin saberlo

La Navidad se ha convertido en una fiesta comercial, sostenida en parte por las compañías y campañas publicitarias más grandes. En muchos lugares vemos a un “Papá Noel” disfrazado. Los anuncios publicitarios nos mantienen engañados sobre el “espíritu navideño”. Los diarios que publican estos anuncios también publican editoriales que exaltan y elogian la festividad pagana y su “espíritu”. La gente crédula está tan convencida que muchos se ofenden al conocer la verdad. Pero el “espíritu de Navidad” es revivido cada año, no para honrar a Cristo ¡sino para vender mercancías! Como todos los engaños de Satanás, la Navidad también se presenta como “ángel de luz”, algo aparentemente bueno, Todos los años se derrochan miles de millones en compras… ¡mientras la causa de Cristo sufre por ello! ¡Esto es parte del sistema económico de Babilonia!

Nos hemos denominado naciones cristianas, pero sin saberlo estamos realmente en Babilonia, tal como lo predijo la Biblia. Apocalipsis 18.4 nos advierte: “Salid de ella, pueblo mío, para que no seáis partícipes de sus pecados, ni recibáis parte de sus plagas”.

Este año, en lugar de intercambiar regalos, ¿por qué no invertir ese dinero en la Obra de Dios?.

http://despiertavivimosenunamentira.com/el-verdadero-origen-de-la-navidad/

miércoles, 2 de marzo de 2016

¿Que nos hace masones regulares?

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V:.M:. QQ:.HH:. ¿Que nos hace masones regulares?

La respuesta más sencilla es: que todo aquel que fue iniciado una logia regular y cumple con sus obligaciones es masón regular. Esta obligaciones son en un principio aceptar los” Landmarks” o antiguos linderos, y comportarse en logia según los dictados de la Constitución de la Gran Logia. Otro aspecto no menos importante es estar aplomo con la masonería ya que al no hacerlo, puede implicar que el integrante no pueda seguir activando dentro de la logia.

Para ser Masón se requiere que el candidato sea hombre libre, de buenas costumbres mayor de 21 años de edad, con suficiente solvencia económica para solventar y mantenerse a sí mismo y a su familia incluyendo los gastos de ser Masón y haya sido Iniciado en una Logia Regular, Justa y Perfecta .

Logia será Regular si tiene la Carta Patente Constitutiva, emitida por una Autoridad Masónica Regular, la Logia será justa si tiene las Tres Luces del Taller (siendo una de esas luces “El Volumen de la Sagrada Ley” lo que es muy importante cuando queremos buscar las diferencias entre regular e irregular). La Logia será Perfecta si tiene el quorum de miembros y oficiales constitucionalmente requeridos para abrir los Trabajos.

Ahora bien, aún no hemos definido que es una “Logia Regular” y para eso tenemos que repasar un poco de historia. Es comúnmente aceptado, que la masonería moderna especulativa nació, el 24 de junio de 1717, con la reunión de Cuatro Logias Londinenses, creándose La Gran Logia de Inglaterra. Este es el comienzo de la Masonería Regular , aquella que está reconocida a nivel nacional, internacional y mundial con la regularidad o reconocimiento, que solo confieren los Grandes Orientes ,todo partiendo de la Gran Logia de Inglaterra y acogiéndose a los Postulados sobre la Regularidad Masónica promulgados en 1929 por la Gran Logia Unida de Inglaterra. Los integrantes de esta Gran Logia Unida de Inglaterra, eran en su mayoría protestantes, y fue un desafío a la absoluta soberanía de la Iglesia Católica. Durante el siglo XVIII la masonería fue condenada en distintas ocasiones por el papado. Sin embargo, y a diferencia de lo que sucediera en España, Portugal o los Estados Pontificios, estas condenas no fueron promulgadas inmediatamente ni en Francia, ni en Inglaterra, ni en Alemania, ni en Austria.

Ello permitió que en las logias establecidas en los territorios de estos países conviviesen católicos con protestantes, e incluso se registrase en las mismas la presencia de religiosos y sacerdotes. Las regiones que componen la actual Bélgica disfrutaron de esta situación, hasta que en 1837 se publica una circular haciendo públicas las excomuniones contra la masonería. Ello condujo a una clara politización y a una toma de postura anticlerical, e incluso antirreligiosa, del Gran Oriente de Bélgica. En consecuencia con estos hechos, en 1854 suprimió el artículo 135 de sus estatutos, que prohibía las discusiones políticas y religiosas en logia, y en 1872 el artículo 12, que obligaba a creer en Gran Arquitecto del Universo y en la inmortalidad del alma.

La conducta del Gran Oriente de Bélgica fue seguida años más tarde por el Gran Oriente de Francia, creándose en los masones franceses un rechazo de lo católico y estimularon las iniciaciones de agnósticos y ateos. Finalmente, en 1877, cinco años más tarde el Gran Oriente de Francia eliminó también de sus estatutos la obligación de creer en el Gran Arquitecto del Universo, en la inmortalidad del alma y prestar juramento sobre un libro sagrado. Las determinaciones tomadas por los Grandes Orientes belga y francés ocasionaron en los medios masónicos anglosajones un verdadero escándalo de modo que la Gran Logia de Inglaterra rompió todos los lazos con aquellas familias masónicas continentales.

En forma esquemática, se puede decir que una logia regular clásica o anglosajona, tiene que cumplir con las siguientes características:

1- La creencia en el Gran Arquitecto del Universo y en la inmortalidad del alma.

2- Todos los iniciados aceptan su Obligación sobre, o en presencia, de un Volumen abierto de la Santa Ley.

3- Los Miembros de la Gran Logia y de las Logias individuales deben componerse de hombres exclusivamente; y cada Gran Logia no mantendrá relación alguna con las logias mixtas o de los organismos que admiten a mujeres como miembros.

4- La Gran Logia tendrá poderes de jurisdicción soberanos sobre las Logia bajo su control.

5- Las Tres Grandes Luces de la Frank-Masonería: el Volumen de la Ley Santa, la Escuadra y el Compás, estarán siempre expuestos durante los Trabajos de la Gran Logia y de las Logias de su obediencia. La más importante de las tres es el volumen de la Ley Santa.

6- Toda discusión religiosa o política está absolutamente prohibida en el interior de las Logias.

7-Los principios de los antiguos Reglamentos, Usos y Costumbres de la Franc-Masonería serán estrictamente observados.

En la masonería irregular Las segundas o “irregulares”, seguidoras con mayores o menores matices de los ejemplos belga y francés, denominada también inexactamente masonería latina, se caracterizaron por permitir en sus templos el debate político religioso y, por iniciar y afiliar agnósticos y ateos. Dentro de la masonería irregular se situaron también aquellas obediencias que dieron entrada a la mujer en los trabajos de logia.

No hay obligación que este abierto o la presencia del Volumen de la Sagrada Ley, e inclusive en algunos países fueron sustituidos por la constitución del país en que trabajan. La compleja situación creada por el nacimiento de las obediencias irregulares, ha perdurado hasta nuestros días. Incluso la Gran Logia de Inglaterra, sólo se ha limitado a exigir la ortodoxia formal de las obediencias que auspicia y ha cerrado los ojos, con demasiada frecuencia, a las realidades socio-ideológicas de las mismas. Esto ha dado l lugar a que muchas obediencias, tenidas oficialmente por regulares (especialmente establecidas en países de la Europa Meridional y de Iberoamérica), estén impregnadas de un espíritu anticlerical y laicista, contrario, sin duda, a la neutralidad políticoreligiosa exigida por las Constituciones de Anderson.

Una de las partes más hermosas de nuestro ritual es, cuando el Venerable Maestro pregunta al primer Vigilante, Sois Mason, y la respuesta mis hermanos me reconocen como tal. O sea, nuestro comportamiento y reconocimiento de los demás determinaran si somos verdadero masones y que potencia masónica nos reconoce.

Ahora quiero citar lo escrito por nuestro Q:.H:. Isaías Firstater en su trabajo “Masonería Regular e Irregular” (2012): “En forma personal, yo acepto a cada miembro de la masonería como un hermano. El hecho que un hermano cese de ser regular por haber dejado de contribuir a la logia o haberse incorporado a otra logia, sea esta regular o irregular, o pertenecer a un Oriente no reconocido por la Gran Logia en cuya jurisdicción trabajo, no cambia para mis normas de conducta el reconocerlo como persona con comportamiento masón” ….a título personal. Ya qué al iniciarme en la masonería, entre a formar parte de una Orden y acepte también cumplir con sus reglas, y estas establecen que no puedo participar en las actividades de logias “no regulares” o “reconocidas”, so pena de ser expulsado de mi logia, y dado que una Orden es un complejo jerárquico y no una democracia, a nivel institucional, todo el tiempo que acepte trabajar en este marco, tengo que abstenerme de todo contacto público (no autorizado) con logias o hermanos irregulares. Por supuesto que el nivel institucional no rige sobre las relaciones personales con personas como seres sociales y humanos.” Aquí termina la escrito por nuestro querido hermano Firstater, en Octubre del 2012, cuando el nuestra logia ocurrían discusiones sobre ese tema. Yo personalmente acepto totalmente lo dicho por el, y desearía que de alguna forma sea posible que todas las corrientes masónicas, sin perder cada una su autonomía, puedan trabajar en conjunto y con buenas relaciones, para tratar de tener un mundo mejor para todos.

Jorge Gutkind La Fraternidad No 62 Tel Aviv 21/01/16

http://www.fenixnews.com/2016/02/29/que-nos-hace-masones-regulares/

lunes, 29 de febrero de 2016

Carta a una profana

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Carta a una profana


Estimada amiga, te interesas por esta augusta y anciana orden aunque no sabes muy bien por qué, no nos conoces más que de oídas y mal, en este país nuestro no se suele hablar bien de quienes molestan por su espíritu libre y su escasa capacidad por sujetarse a normas injustas, también es verdad que cuarenta años de mala prensa pagada por el dictador aquel, y sus secuaces, hicieron su mella en el pueblo. A pesar de todo tú llamas, preguntas, algo te mueve a saber más, y quizás y si una logia lo considera conveniente hasta termines siendo una hermana más entre nosotros.

No conoces a ningún masón -crees-, mucho menos a una masona, siempre has leído eso de que la masonería es cosa de hombres, vamos como aquel coñá de los años 70, pero por uno de esos azares de la vida has dado con algunas páginas en Internet que hablan de otra cosa, de una sociedad masónica en la que la mujer sí tiene un lugar y no como florero sino como alguien igual al hombre.

Esa pequeña puerta te franquea la entrada a un mundo nuevo y eso te reafirma aún más en tus deseos de compartir algunos momentos de tu vida con ese grupo de seres humanos tan raros si fueses capaz de saber qué es lo que se cocina en ese lugar que llaman logia o taller, hasta templo has oído decir y eso te ha dejado un poco mosca, por aquello de la educación judeocristiana no por otra cosa. No hay altares, sabes, aunque entre nosotras y nosotros se de una amplia muestra de creencias y no creencias y hasta las dudas de quienes viven en el agnosticismo. Casi podríamos decir aquello de “ni dios, ni patria, ni rey”, ciudadanos del mundo -somos una orden internacional e internacionalista- gracias a la visión de nuestros fundadores que entendieron que la globalización, en el mejor sentido del concepto, era necesaria -casi imprescindible- si aspiramos a construir una sociedad más justa, libre y fraterna para todos los pueblos de la tierra.

No hay altares pero hay respeto para quienes los necesiten, aunque no aquí, ni creemos que deban existir en el espacio público ya que la cosa esta de la creencia es algo íntimo y personal y tratar de que sea público y de obligado cumplimiento nos parece un exceso reprobable. Por eso a la iglesia católica no le gustamos, me imagino que tampoco a los ayatolás islamistas y sospecho que lo mismo ocurre con los rabinos ortodoxos, vamos a nadie que crea que la vida se debe regir por algún dogma emanado de alguna divinidad desconocida. Esto, bien es verdad, que hace que entre nosotros sean escasos los miembros de determinadas confesiones, eso que se llama la religión organizada. Parece pues que lo de la religión no es lo nuestro, está claro.

Te preguntarás quizás si nos dedicamos a la política, más que nada porque has leído algunas cosas de las que podría desprenderse que nuestros talleres son una especie de ágora en la que el debate político está a la orden del día. Pues tampoco, procuramos que los ruidos de la calle nos perturben lo menos posible y está claro que lo referido a la política de partidos es una algarabía insufrible e insoportable. Esto no quiere decir, naturalmente, que no nos interesa la cosa pública, y mucho he de decir, lo que ocurre es que nos acercamos a ella desde una postura ciudadana que nos permite fijar nuestra posición sobre temas como el derecho a morir con dignidad, la educación, la explotación, la ecología…, vamos esas cosas que a todos interesan y que por tanto son política con mayúsculas, aunque debo añadir que no es que dediquemos todo nuestro trabajo a esas cuestiones.

Querida amiga, nos dedicamos en cuerpo y alma a la búsqueda, de la verdad (no me atrevo a ponerlo con mayúscula pues a estas alturas ya sé que no existe la Verdad sino pequeñas verdades), del conocimiento (primero el propio, después aquello que nos atañe: todo), a construir -siempre la construcción- en la medida de nuestras posibilidades el Progreso de la Humanidad. Como ves nada raro, aunque sí con compromiso, cada cual el que considere conveniente, ni pedimos mucho ni nos conformamos con poco, cada cual es libre. Querida amiga, si todo esto es lo que buscas se bienvenida. Llama que te escucharemos y es posible que te llegues a convertir en una piedra más de este hermoso edificio que es la masonería.

Llegado aquí me vas a permitir un estrambote, lo dicho sirve para cualquiera, mujer u hombre, aunque quería dedicártelo a ti precisamente, porque, desconozco la razón, es más difícil que creas que en esta obra tienes un hueco, el que te mereces como un ser humano igual a mí.

Fuente: Masonería Mixta