viernes, 23 de mayo de 2025

LAS PEQUEÑAS GRANDES LOGIAS: ¿DEBILIDAD O FORTALEZA PARA LA MASONERÍA?

LAS PEQUEÑAS GRANDES LOGIAS: ¿DEBILIDAD O FORTALEZA PARA LA MASONERÍA?

 (Palabras pronunciadas en el Segundo Simposio Masónico “Francmasonería en la Modernidad” organizado por la Gran Logia Universal de Mixta de New Jersey, los días 20 y 21 de septiembre 2013 (E:. V:.) Por LAS PEQUEÑAS GRANDES LOGIAS: ¿DEBILIDAD O FORTALEZA PARA LA MASONERÍA? (Palabras pronunciadas en el Segundo Simposio Masónico “Francmasonería en la Modernidad” organizado por la Gran Logia Universal de Mixta de New Jersey, los días 20 y 21 de septiembre 2013 (E:. V:.) Por Iván Herrera Michel Uno de los más llamativos comportamientos de la Masonería de finales del siglo XX y de comienzos del XXI, lo constituye la aparición en todas partes del mundo de Grandes Logias, Grandes Orientes, Federaciones de Logias, Supremos Consejos del Rito Escocés Antiguo y Aceptado, Capítulos Generales del Rito Francés, Santuarios del Rito Memphis, Etc., de no más de unos 300 miembros agrupados en un máximo de 15 Logias, con un presencia muy activa en la radio, la televisión, la prensa y el Internet. Al parecer lo mediático les atrae, sobre todo para hacer público que son una Masonería fraternal, amable, que sus Templos no tienen telarañas, que se ocupan de los problemas actuales, que son personas de buenas costumbres, que es verdad que creen en la libertad, la igualdad y la fraternidad hasta el extremo de haber proscrito, en gran parte de su seno, la discriminación contra la mujer, que lo Masónico es una opción admirable, que respetan las creencias de todos, que son ciudadanos comunes y corrientes, que no quieren tener conflictos con otros Masones, que no les importa mucho lo que decidan en Londres, París o Washington, ni aceptan jefes que les impongan obligaciones ajenas a la doctrina Masónica. Estas nuevas opciones, aunque todavía minoritarias en número de miembros con respecto Izq. a Der. SGC Adriano Medina, GM Benjamín Sabido, Víctor Salazar a las de mayor antigüedad de su localidad, cuentan con un gran “empoderamiento”, buscan adquirir sus propias edificaciones, poseen una economía de autoabastecimiento, se les nota inclinación general al estudio y la discusión abierta, y cada vez es mayor la influencia que poseen en el cambio del imaginario de la Orden en la sociedad en general. En América, esa realidad contrasta con la caída en la membresía de las Obediencias de donde eran originarios sus fundadores. Y la razón es sencilla: encarnan los sueños de varias generaciones de Masones de a pie de practicar un determinado estilo de Masonería, de acabar los caudillismos y de contar en lo organizacional con una democracia más participativa. Hoy vemos que el mensaje de estas nuevas Obediencias está llegando con mucha fuerza a profesionales, comerciantes y segmentos de la clase media que antes estaban poco penetrados, y de donde proceden muchos de sus nuevos Iniciados. Además, existe una demanda de socializar alrededor de valores humanistas que no se identifica con lo que ven en la Masonería de corte anglosajón y optan por un ambiente más liberal y progresista, posibilitando la aparición de diferentes perfiles que cubren más amplios sectores de la sociedad. Es muy difícil poder contar cuantas Grandes Logias han nacido después de la segunda guerra mundial. Es posible que algo tenga que ver esta expansión con la distención social y la incorporación de la mujer al mercado laboral que siguió al conflicto bélico. El surgimiento de una nueva generación con un concepto más definido de la autonomía y de la autorrealización, pudo también ayudar a debilitar la concepción de que la disciplina institucional está por encima de la doctrina Masónica, y apoyar la idea de que siempre es posible crear una nueva Gran Logia. En este orden de ideas, uno se sorprende de la cantidad de Obediencias que trabajan sin mayores aspavientos y con mucho fervor, tratando de hacer las cosas bien y de que la fraternidad entre sus miembros sea una realidad. Las más conocidas son las que asisten a encuentros plurales y predican en Internet con mucho entusiasmo su existencia, pero la verdad es que muchas están pasando desapercibidas, porque poseen estrategias no tan invasivas para mostrar la vida Masónica como un camino que sigue siendo contemporáneo y abierto a todos, siempre y cuando el accionar personal tenga sustento moral sólido. La dinámica del surgimiento de nuevas Obediencias Masónicas se ha intensificado, porque a la par de mantener una raíz común con la historia y la filosofía de la Orden, ha promovido la práctica de la protección mutua con vínculos de solidaridad e inclusión, además de la afabilidad entre sus miembros en un ambiente general de transformación valórica del tejido familiar y social. Jersey City (Nueva Jersey) vistos desde Battery Park en Nueva York No hay que menospreciar el fenómeno, porque más que una atomización de la Orden, el grueso de las pequeñas Obediencias que existen obedece al empuje de lo que hoy podríamos llamar, usando un término de reciente cuño, los “indignados” de la Masonería. En efecto, al igual que en el movimiento ciudadano surgido en España y propagado por muchos países que conocemos desde el año 2011 como de los indignados, estamos frente a unos Masones que se organizaron luego de protestar pacíficamente en sus Obediencias de origen en la búsqueda de una versión más coherente de Masonería, alejada de personalismos, falsa división de poderes y segmentaciones antifraternales. Las nuevas Obediencias, por lógica más pequeñas que las anteriores, se distinguen más por su manera de accionar que por un cambio drástico en sus doctrinas, a las que de todos modos asumen con una visión más liberal. Naturalmente, deseo dejar sentado a estas alturas que me refiero a lo que se define a partir de un proyecto serio y bien intencionado, y no a las aventuras de diversos plumajes o con interés comercial que en ocasiones encontramos. El movimiento, que comenzó con una concepción muy localista, a partir de desencuentros específicos que buscaban la recuperación de la trasparencia del espacio Masónico, con el pasar de los años ha puesto en contacto entre sí a sus exponentes y se ha ido redibujando la geopolítica Masónica en la medida de que sus confederaciones, Coloquios, Simposios, Etc. representan, hoy en día, una fuente doctrinal importante como resultado de poder tratar libremente ciertos temas de interés general, así como un conglomerado a tener en cuenta por los grandes actores del panorama Masónico mundial. En este orden de ideas, en un hecho claramente visible, los miembros de este grupo han terminado creando plataformas para encuentros abiertos y proyectos colectivos sin afiliación institucional o subordinación alguna, pero conservando la intención indeclinable de sostener un diálogo respetuoso con todos, que termina siendo también una fuente de inspiración pro movilización en lugares en donde las diferencias aún no se concilian fraternalmente, o el ejercicio del poder se considera absolutista. En el Simposio, con el GM puertorriqueño Edgar Mtnez. y la IPH:. Ayda Perez Pareciera que los indignados de la Masonería que crean nuevas Obediencias, desean un cambio y un futuro más fiel a los principios generales de la Orden que garantice la igualdad de todos los Masones para acceder a los Grados, enseñanzas y Dignidades, y una jurisdicción que destierre de la vida Masónica a los embaucadores, así como una fraternidad que garantice por lo menos una buena amistad. La inmensa mayoría de los líderes de las Grandes Logias históricas no han querido escuchar a los indignados locales, ni a los miles de Masones y Masonas que reclaman la abolición y el cambio en las normas injustas y discriminatorias, y los vicios que han permeado a la Orden en su interacción con las sociedades profanas. Tampoco, incluyen en sus grandes citas un punto del Orden del Día para tratar un tema que se les ha escapado de sus manos. Es una verdadera política de avestruz que niega el cambio que ya se presentó en la implantación universal de la Masonería. La baja en la membresía y en las Iniciaciones, son apenas un par de indicadores de cómo han ido perdiendo presencia social. De hecho, el aumento y la mayor diversidad Masónica son fenómenos frecuentes en sociedades más abiertas y plurales, y cerrarse a esta realidad implica la pérdida de los miembros que rechazan sus posturas conservadoras arrogantes, al tiempo que se dan cuenta que “su” Masonería es una más entre otras, y no “la” Masonería, como estaban convencidos de que eran antes de que el Internet le contara a la Aldea Global la verdad de la institucionalidad Masónica. Son varias las cosas buenas que se observan en la práctica en el accionar de las Obediencias pequeñas. La comprensión, la conformidad, la oportunidad y la proximidad entre sus miembros hacen que los debates sean eficaces. Y de todos modos, una Obediencia de las llamadas chicas se divide también obligatoriamente en otros subgrupos que son las Logias, en las que ya sobre la marcha general posee reflexiones con presupuestos más participativos y dificultades fácilmente conciliables, y los debates sobre los contenidos con los que se quiere trabajar fluyen más allá de convertirse en un decálogo de buenas intenciones al momento del debate grupal. Mediante este ejercicio, cuando los temas importantes pasan a consideración del plenario central ofrecen la oportunidad de ayudar a la Obediencia a alejarse de la comodidad vegetativa y a aceptar los cambios y los desafíos con que el contexto social reta al método Masónico de construcción personal y colectiva de reasignificación y reubicación personal. Con los IIHH:. Víctor Salazar y Juan Orrego, en un descanso de los trabajos QQ:. HH:., Sabemos que en la Masonería existe una alta movilidad de personas que llegan y se van pronto de las Logias. A algunas la experiencia, aunque sea corta, les sirve para resituarse en relación con los otros y para asumirse como protagonista principal de su propia vida. Para trabajar la empatía y a hacerle visible diferentes formas de construir una realidad personal y social. Con frecuencia, resaltamos esta experiencia, desde grandes y pequeñas Obediencias. Tampoco, es patrimonio de ninguna de ellas el sugerir en exclusiva una articulación constructiva entre lo personal y lo grupal, ni el proponer en el marco de lo ritual una reflexión sobre la reciprocidad entre lo instintivo, lo emocional inconsciente y la racionalidad consiente, así como sobre su rol Iniciático en lo que hacemos. No es cuestión de cuanto duramos asistiendo a una Logia. Para quienes permanecemos en ella por un lapso mayor, un punto importante es definir que seguimos haciendo allí. Y el tema no es fácil, porque, naturalmente, depende de que deseemos hacer cada uno de nosotros en la Masonería. Es decir, que a diferencia de otras organizaciones, en la Masonería sus efectivos más antiguos no necesariamente tienen la obligación de enseñar, aunque sí la de ayudar a transferir la Tradición Masónica, que es un proceso muy distinto y más colmado de incertidumbres y de complejidad. En el Rito Escocés Antiguo y Aceptado decimos que tenemos que llevar “orden desde el caos”, que es algo parecido, y a ello no le podemos atar una particular dimensión temporal ni un necesario guarismo de Masones dedicados a la labor. La construcción de un tejido fraternal desde las Logias se tiene que presentar en modelos de participación Iniciática y en la adopción y aceptación de las diferentes formas de conducirse en las interacciones Masónicas. La comunicación y la trasmisión de la tradición instituyen el desarrollo integral de los Masones, con lo que se fortalece la adopción de adecuadas maneras de pulimento de la Piedra Bruta. Comite Organizador del Simposio En un área mayor, las Obediencias de pocos miembros tienden a actuar de manera cooperativa, y se favorece el que la fortaleza de la fraternidad dependa de la acción de cada Masón y de su sentido de pertenencia. En este camino, se observa que comprometen su accionar en la solución de dificultades relacionadas con la equidad, la reciprocidad y la observancia de los principios generales de la Masonería. En principio, yo aconsejo que los conflictos que de tarde en tarde crean tensiones en las Grandes Logias obstaculizando su gestión administrativa, su cohesión fraternal y su devenir Iniciático, se solucionen por las vías del diálogo y el consenso. La observancia de una estructura democrática con separación real de poderes puede ayudar mucho a superarlos. No obstante, todos sabemos, que hay un momento en que se torna incompatible la coexistencia en una misma Obediencia, sobre todo cuando hay mayorías que se oponen por inercia, temor o interés personal a practicar una Masonería de buena calidad y prefieren un estatus quo poco Masónico. En estos casos, soy un decidido partidario de que lo mejor para los Hermanos y para la Masonería es fundar una nueva Gran Logia, y en este sentido la aparición de nuevas Obediencias es una oportunidad para la Orden. Y no hay que preocuparse mucho por ello, porque en honor a la verdad históricamente comprobada, y aunque parezca un contrasentido, desde 1717 en que se fundó la primera Gran Logia en Londres, la Masonería siempre se ha multiplicado dividiéndose. Muchas gracias, Queridos Hermanos. Uno de los más llamativos comportamientos de la Masonería de finales del siglo XX y de comienzos del XXI, lo constituye la aparición en todas partes del mundo de Grandes Logias, Grandes Orientes, Federaciones de Logias, Supremos Consejos del Rito Escocés Antiguo y Aceptado, Capítulos Generales del Rito Francés, Santuarios del Rito Memphis, Etc., de no más de unos 300 miembros agrupados en un máximo de 15 Logias, con un presencia muy activa en la radio, la televisión, la prensa y el Internet. Al parecer lo mediático les atrae, sobre todo para hacer público que son una Masonería fraternal, amable, que sus Templos no tienen telarañas, que se ocupan de los problemas actuales, que son personas de buenas costumbres, que es verdad que creen en la libertad, la igualdad y la fraternidad hasta el extremo de haber proscrito, en gran parte de su seno, la discriminación contra la mujer, que lo Masónico es una opción admirable, que respetan las creencias de todos, que son ciudadanos comunes y corrientes, que no quieren tener conflictos con otros Masones, que no les importa mucho lo que decidan en Londres, París o Washington, ni aceptan jefes que les impongan obligaciones ajenas a la doctrina Masónica. Estas nuevas opciones, aunque todavía minoritarias en número de miembros con respecto Izq. a Der. SGC Adriano Medina, GM Benjamín Sabido, Víctor Salazar a las de mayor antigüedad de su localidad, cuentan con un gran “empoderamiento”, buscan adquirir sus propias edificaciones, poseen una economía de autoabastecimiento, se les nota inclinación general al estudio y la discusión abierta, y cada vez es mayor la influencia que poseen en el cambio del imaginario de la Orden en la sociedad en general. En América, esa realidad contrasta con la caída en la membresía de las Obediencias de donde eran originarios sus fundadores. Y la razón es sencilla: encarnan los sueños de varias generaciones de Masones de a pie de practicar un determinado estilo de Masonería, de acabar los caudillismos y de contar en lo organizacional con una democracia más participativa. Hoy vemos que el mensaje de estas nuevas Obediencias está llegando con mucha fuerza a profesionales, comerciantes y segmentos de la clase media que antes estaban poco penetrados, y de donde proceden muchos de sus nuevos Iniciados. Además, existe una demanda de socializar alrededor de valores humanistas que no se identifica con lo que ven en la Masonería de corte anglosajón y optan por un ambiente más liberal y progresista, posibilitando la aparición de diferentes perfiles que cubren más amplios sectores de la sociedad. Es muy difícil poder contar cuantas Grandes Logias han nacido después de la segunda guerra mundial. Es posible que algo tenga que ver esta expansión con la distención social y la incorporación de la mujer al mercado laboral que siguió al conflicto bélico. El surgimiento de una nueva generación con un concepto más definido de la autonomía y de la autorrealización, pudo también ayudar a debilitar la concepción de que la disciplina institucional está por encima de la doctrina Masónica, y apoyar la idea de que siempre es posible crear una nueva Gran Logia. En este orden de ideas, uno se sorprende de la cantidad de Obediencias que trabajan sin mayores aspavientos y con mucho fervor, tratando de hacer las cosas bien y de que la fraternidad entre sus miembros sea una realidad. Las más conocidas son las que asisten a encuentros plurales y predican en Internet con mucho entusiasmo su existencia, pero la verdad es que muchas están pasando desapercibidas, porque poseen estrategias no tan invasivas para mostrar la vida Masónica como un camino que sigue siendo contemporáneo y abierto a todos, siempre y cuando el accionar personal tenga sustento moral sólido. La dinámica del surgimiento de nuevas Obediencias Masónicas se ha intensificado, porque a la par de mantener una raíz común con la historia y la filosofía de la Orden, ha promovido la práctica de la protección mutua con vínculos de solidaridad e inclusión, además de la afabilidad entre sus miembros en un ambiente general de transformación valórica del tejido familiar y social. Jersey City (Nueva Jersey) vistos desde Battery Park en Nueva York No hay que menospreciar el fenómeno, porque más que una atomización de la Orden, el grueso de las pequeñas Obediencias que existen obedece al empuje de lo que hoy podríamos llamar, usando un término de reciente cuño, los “indignados” de la Masonería. En efecto, al igual que en el movimiento ciudadano surgido en España y propagado por muchos países que conocemos desde el año 2011 como de los indignados, estamos frente a unos Masones que se organizaron luego de protestar pacíficamente en sus Obediencias de origen en la búsqueda de una versión más coherente de Masonería, alejada de personalismos, falsa división de poderes y segmentaciones antifraternales. Las nuevas Obediencias, por lógica más pequeñas que las anteriores, se distinguen más por su manera de accionar que por un cambio drástico en sus doctrinas, a las que de todos modos asumen con una visión más liberal. Naturalmente, deseo dejar sentado a estas alturas que me refiero a lo que se define a partir de un proyecto serio y bien intencionado, y no a las aventuras de diversos plumajes o con interés comercial que en ocasiones encontramos. El movimiento, que comenzó con una concepción muy localista, a partir de desencuentros específicos que buscaban la recuperación de la trasparencia del espacio Masónico, con el pasar de los años ha puesto en contacto entre sí a sus exponentes y se ha ido redibujando la geopolítica Masónica en la medida de que sus confederaciones, Coloquios, Simposios, Etc. representan, hoy en día, una fuente doctrinal importante como resultado de poder tratar libremente ciertos temas de interés general, así como un conglomerado a tener en cuenta por los grandes actores del panorama Masónico mundial. En este orden de ideas, en un hecho claramente visible, los miembros de este grupo han terminado creando plataformas para encuentros abiertos y proyectos colectivos sin afiliación institucional o subordinación alguna, pero conservando la intención indeclinable de sostener un diálogo respetuoso con todos, que termina siendo también una fuente de inspiración pro movilización en lugares en donde las diferencias aún no se concilian fraternalmente, o el ejercicio del poder se considera absolutista. En el Simposio, con el GM puertorriqueño Edgar Mtnez. y la IPH:. Ayda Perez Pareciera que los indignados de la Masonería que crean nuevas Obediencias, desean un cambio y un futuro más fiel a los principios generales de la Orden que garantice la igualdad de todos los Masones para acceder a los Grados, enseñanzas y Dignidades, y una jurisdicción que destierre de la vida Masónica a los embaucadores, así como una fraternidad que garantice por lo menos una buena amistad. La inmensa mayoría de los líderes de las Grandes Logias históricas no han querido escuchar a los indignados locales, ni a los miles de Masones y Masonas que reclaman la abolición y el cambio en las normas injustas y discriminatorias, y los vicios que han permeado a la Orden en su interacción con las sociedades profanas. Tampoco, incluyen en sus grandes citas un punto del Orden del Día para tratar un tema que se les ha escapado de sus manos. Es una verdadera política de avestruz que niega el cambio que ya se presentó en la implantación universal de la Masonería. La baja en la membresía y en las Iniciaciones, son apenas un par de indicadores de cómo han ido perdiendo presencia social. De hecho, el aumento y la mayor diversidad Masónica son fenómenos frecuentes en sociedades más abiertas y plurales, y cerrarse a esta realidad implica la pérdida de los miembros que rechazan sus posturas conservadoras arrogantes, al tiempo que se dan cuenta que “su” Masonería es una más entre otras, y no “la” Masonería, como estaban convencidos de que eran antes de que el Internet le contara a la Aldea Global la verdad de la institucionalidad Masónica. Son varias las cosas buenas que se observan en la práctica en el accionar de las Obediencias pequeñas. La comprensión, la conformidad, la oportunidad y la proximidad entre sus miembros hacen que los debates sean eficaces. Y de todos modos, una Obediencia de las llamadas chicas se divide también obligatoriamente en otros subgrupos que son las Logias, en las que ya sobre la marcha general posee reflexiones con presupuestos más participativos y dificultades fácilmente conciliables, y los debates sobre los contenidos con los que se quiere trabajar fluyen más allá de convertirse en un decálogo de buenas intenciones al momento del debate grupal. Mediante este ejercicio, cuando los temas importantes pasan a consideración del plenario central ofrecen la oportunidad de ayudar a la Obediencia a alejarse de la comodidad vegetativa y a aceptar los cambios y los desafíos con que el contexto social reta al método Masónico de construcción personal y colectiva de reasignificación y reubicación personal. Con los IIHH:. Víctor Salazar y Juan Orrego, en un descanso de los trabajos QQ:. HH:., Sabemos que en la Masonería existe una alta movilidad de personas que llegan y se van pronto de las Logias. A algunas la experiencia, aunque sea corta, les sirve para resituarse en relación con los otros y para asumirse como protagonista principal de su propia vida. Para trabajar la empatía y a hacerle visible diferentes formas de construir una realidad personal y social. Con frecuencia, resaltamos esta experiencia, desde grandes y pequeñas Obediencias. Tampoco, es patrimonio de ninguna de ellas el sugerir en exclusiva una articulación constructiva entre lo personal y lo grupal, ni el proponer en el marco de lo ritual una reflexión sobre la reciprocidad entre lo instintivo, lo emocional inconsciente y la racionalidad consiente, así como sobre su rol Iniciático en lo que hacemos. No es cuestión de cuanto duramos asistiendo a una Logia. Para quienes permanecemos en ella por un lapso mayor, un punto importante es definir que seguimos haciendo allí. Y el tema no es fácil, porque, naturalmente, depende de que deseemos hacer cada uno de nosotros en la Masonería. Es decir, que a diferencia de otras organizaciones, en la Masonería sus efectivos más antiguos no necesariamente tienen la obligación de enseñar, aunque sí la de ayudar a transferir la Tradición Masónica, que es un proceso muy distinto y más colmado de incertidumbres y de complejidad. En el Rito Escocés Antiguo y Aceptado decimos que tenemos que llevar “orden desde el caos”, que es algo parecido, y a ello no le podemos atar una particular dimensión temporal ni un necesario guarismo de Masones dedicados a la labor. La construcción de un tejido fraternal desde las Logias se tiene que presentar en modelos de participación Iniciática y en la adopción y aceptación de las diferentes formas de conducirse en las interacciones Masónicas. La comunicación y la trasmisión de la tradición instituyen el desarrollo integral de los Masones, con lo que se fortalece la adopción de adecuadas maneras de pulimento de la Piedra Bruta. Comite Organizador del Simposio En un área mayor, las Obediencias de pocos miembros tienden a actuar de manera cooperativa, y se favorece el que la fortaleza de la fraternidad dependa de la acción de cada Masón y de su sentido de pertenencia. En este camino, se observa que comprometen su accionar en la solución de dificultades relacionadas con la equidad, la reciprocidad y la observancia de los principios generales de la Masonería. En principio, yo aconsejo que los conflictos que de tarde en tarde crean tensiones en las Grandes Logias obstaculizando su gestión administrativa, su cohesión fraternal y su devenir Iniciático, se solucionen por las vías del diálogo y el consenso. La observancia de una estructura democrática con separación real de poderes puede ayudar mucho a superarlos. No obstante, todos sabemos, que hay un momento en que se torna incompatible la coexistencia en una misma Obediencia, sobre todo cuando hay mayorías que se oponen por inercia, temor o interés personal a practicar una Masonería de buena calidad y prefieren un estatus quo poco Masónico. En estos casos, soy un decidido partidario de que lo mejor para los Hermanos y para la Masonería es fundar una nueva Gran Logia, y en este sentido la aparición de nuevas Obediencias es una oportunidad para la Orden. Y no hay que preocuparse mucho por ello, porque en honor a la verdad históricamente comprobada, y aunque parezca un contrasentido, desde 1717 en que se fundó la primera Gran Logia en Londres, la Masonería siempre se ha multiplicado dividiéndose. Muchas gracias, Queridos Hermanos.

ENTREVISTA: M:.R:.H:. IVAN HERRERA M. HABLO CON FENIX SOBRE SU PASION "LA MASONERIA" EN AMERICA Y EN EL MUNDO

ENTREVISTA: M:.R:.H:. IVAN HERRERA M. HABLO CON FENIX SOBRE SU PASION "LA MASONERIA" EN AMERICA Y EN EL MUNDO 


El M:.R:.H:. Ivan Herrera M., magistral conductor de las ideas masonicas de Colombia e indoamerica parece ser el mason del momento en nuestro escenario institucional porque lo vemos siempre que esta invitado como conferencista o columnista en diarios y revista masonicas digitales o impresas de indole locales e internacional. El M:.R:.H:. Ivan herrera, es reputado profesional colombiano, es probablemente el especialista que más conoce de este hemisferio – sobre todo de masoneria– en el mundo. FENIX fue a buscarlo y sostener una cordial y muy personal entrevista en que Ivan Herrera donde expone o revela muchas de sus ideas para bien de nuestros queridos lectores. Esperamos os guste. Presentación: Iván Herrera Michel es un destacado Abogado colombiano con Postgrado en Negocios y Finanzas Internacionales, vinculado a la Academia Universitaria desde 1986. Casado desde 1986 con la Dra. Lucy Palacio, M. D., con dos hijos universitarios de 20 y 18 años de edad. Actualmente, es Presidente de la Federación Americana de Supremos Consejos del REAA (FASCREAA) (2009 – 2011), Canciller de la Federación Colombiana de Logias Masónicas, Colaborador de la Revista “Cultura Masónica” que se publica en España. Miembro Honorario de varias Logias, Grandes Logias y Supremos Consejos del Rito Escocés Antiguo y Aceptado. Miembro de varios centros de investigaciones Masónicas. Igualmente, se desempeñó como Vicepresidente de CLIPSAS por Latinoamérica durante el periodo 2007 – 2010. Es Coautor en compañía de Javier Otaola, Ex Presidente de CLIPSAS y Ex – Gran Maestro de la Gran Logia Simbólica de España, del libro “Una Mirada a la Masonería Actual”(2002). Autor del libro “Historia de la Masonería”, que ya lleva dos ediciones impresas (2004 y 2006), una virtual en idioma castellano (2007) y otra en portugués (2007). Autor del libro “El Escocismo Masónico” (2009). Prologuista y articulista de diversas publicaciones impresas y virtuales, y conferencista en diferentes foros Masónicos nacionales e internacionales. Se han publicado escritos suyos traducidos a los idiomas inglés, francés, portugués, catalán, italiano y alemán. Actualmente escribe periódicamente en Blog PIDO LA PALABRA dedicado al cultivo de la tolerancia y el respeto a la diferencia ENTREVISTA 1) No voy a dar demasiadas vueltas y entraré directamente en el tema que nos interesa ¿Desde cuándo eres Masón? R. Querido Hermano Juan, te contesto también sin dar vueltas. Ingresé en una Logia Masónica el día 4 de junio del año 1983, y, como sabemos, soy Masón desde que mis Hermanos me reconocen como tal. 2) ¿Qué experiencias positivas y negativas has acumulado a lo largo de tu vida Masónica? R. En lo personal, el método de construcción Masónica aplicado a mi propia Piedra Bruta es una experiencia interesantísima y créeme que muy positiva. En lo institucional, me encanta ver como se ha organizado asociativamente la Masonería latinoamericana progresista en los últimos diez años. En cuanto a lo negativo con que me he topado al interior de la Masonería, trato de no cargar lastres en mi corazón ni en mi mente. Sin embargo, te confieso que me entra una gran desazón que me dura un buen tiempo cuando veo en una ciudad o en un país varias Grandes Logias que no se tratan o a Masones discriminándose. No he podido aprender a explicárselo a los nuevos Masones sin sufrir pena ajena. Frente a esta recurrente sinrazón Masónica, siempre recuerdo que el Mosaico de cuadros blancos y negros se encuentra dentro de la Logia, para, entre otras cosas, enseñarnos que los Masones permanentemente estamos convocados a lo perfectible y caminamos sobre él. De allí que lo positivo y negativo que encontramos entre los Hermanos es una oportunidad constructiva más que hay que agradecerle a la Orden. 3) Mucha gente piensa que la Masonería era una organización muy elitista. ¿Lo es? R. Claro que lo es. Es una élite de hombres y mujeres libres y de buenas costumbres que han optado por recorrer un camino de autoconstrucción. Es una élite que ha asumido un método signado por valores y principios centrados en la dignidad humana. 4) Quisieras explicar a los amigos que nos leen y que no son Masones, ¿qué es el Ser Supremo en el que hay que creer para ser Masón? R. Mi Querido Hermano Juan, el que planteas es un tema polémico dentro de la diversidad existente en la Masonería y que ha sido fuente de duras controversias, por lo que me voy a detener un poco. Algunas Grandes Logias exigen la creencia en un Ser Supremo al estilo del Dios de las religiones judía, cristiana y musulmana. Otras aceptan que se tenga sobre esta exigencia una versión metafísica que sobrepasa a los hombres, al estilo del Pachamama, conciencia crística, energía cósmica, Etc. También encontramos Masones que poseen una fuerte concepción esotérica, formados en otras escuelas iniciáticas o de una notable inclinación espiritual, pero que no reconocen un Ser Supremo. Son personas que en el hinduismo y en la Teosofía se conocen con la palabra sánscrita “nástika”, que significa ateo, precisamente porque no reconocen la existencia de un dios ni de una verdad revelada contenida en un libro sagrado. En este sentido, hasta Madame Blavatsky usó la expresión en el primer tomo de la “Doctrina Secreta” al afirma que todo ocultista es un nástika ya que el ocultismo es incompatible con la creencia en la existencia de un dios. Unos más sostienen que lo que llamamos el Gran Arquitecto del Universo es una simple alegoría, o que puede ser entendida como las leyes de la física, o la segunda Ley de la termodinámica de Newton. Estos Masones son claramente ateos o siendo creyentes en un dios no le reconocen a la Masonería ninguna connotación espiritual o religiosa. Lo curioso es que todas estas concepciones las encontramos por igual dentro de las escuelas anglosajona y liberal de entender la Masonería. Por su lado, hay quienes no exigen a sus miembros creer en un Ser Supremo o Dios. Por ejemplo, el Gran Oriente de Francia está constituido por Masones ateos (esotéricos o no) y creyentes (esotéricos o no) en igualdad de condiciones, y eso nos les impide a ninguno de ellos alcanzar los más altos Grados y cargos directivos de la Masonería, ya sea que practiquen el Rito Escocés Antiguo y Aceptado, el Rito Francés, o cualquier otro autorizado. Yo creo que con las personas que desean ser Masonas debemos ser totalmente sinceros acerca del posicionamiento de la Gran Logia a la que las vamos a presentar, sobre todo en temas que pueden ser sensibles para el aspirante como el de la política, la religión, el género u orientación sexual, lo filosófico, Etc., con el fin de evitarles incomodidades futuras a ellos y a la Obediencia. 5) ¿Cuáles son las características del hombre perfectible? No hay un hombre o una mujer perfectible y ni otros que no lo sean, toda persona es perfectible. Naturalmente, no todas ellas lo asumen en igual grado y medida. Influye la genética, su biografía personal y el entorno. Le tengo una inmensa confianza al ser humano y mucha fe a su inclinación natural hacia su perfectibilidad. En ocasiones, es cuestión de tocar las fibras correctas. 6) Dime una cosa Iván, si la ciencia confirmara que fue Evolución y no Creación, la misma existencia del universo ¿Cómo cuál sería la posición de la Masonería? R. Volvemos al tópico de tu 4ª pregunta. Cada Gran Logia o Gran Oriente, así como cada Masón o Masona, está en libertad de adoptar o no una postura sobre lo que considere correcto frente a los predicamentos de la ciencia y de las religiones. No hay algo así como una sola voz Masónica que represente el conjunto universal de los Masones y Masonas del mundo. Institucionalmente hablando, que bueno sería que la Masonería fuera una interlocutora, frente a los organismos internacionales como la ONU, para citar un solo ejemplo. Pero para esto debemos ponernos de acuerdo los cinco millones de Masones y Masonas que dicen que somos, alrededor de la más absoluta libertad de conciencia, de una perfecta aceptación y de una tolerancia mutua. En verdad, y siendo realista, no veo cercana esa unión. Pero hay una “opinión pública” interna reclamando cosas en un mundo globalizado y muy informado que tarde o temprano producirá cambios. 7) ¿Cómo avizoras el futuro de la Masonería liberal y adogmática de Indoamericana? R. La veo unida en el mediano plazo. Hay un gran impulso en nuestra región desde hace unos 15 años en dirección a la forma liberal y adogmática de concebir y practicar la Masonería a la que no le veo eclipses. Claro está, que en cada experiencia las cosas no se dan con la misma intensidad ni al mismo ritmo. Cuenta mucho la sociología y en cada caso el parto es diferente. Igualmente, existe una clara inclinación hacia el relacionamiento con otras Grandes Logias liberales y adogmáticas del mundo. Por ejemplo, es notoria nuestra participación cada vez mayor en CLIPSAS, institución que llegó al año 2000 contando con ocho Grandes Logias latinoamericanas en su seno y ahora tiene veinte. Este fenómeno profundizara y expandirá las concepciones progresistas. Paralelamente, en estos últimos diez años han nacido con vocación latinoamericanista la Confederación Interamericana de Masonería Simbólica (CIMAS), la Conferencia Masónica Americana (COMAM) y la Confederación Continental de Potencias Masónicas Americanas (CCPOMA). Estas asociaciones no existían hace una década y se encuentran transitando hacia la unión. Es de esperar un feliz término y creo que entre todos debemos presionar para que sus directivos y sus Asambleas Generales avancen en esa dirección. Por su lado, las Grandes Logias que conforman la Confederación Masónica Americana (CMI), unas más que otras, se encuentran bajo presión interna hacia la fraternización interobedencial, pero poseen superestructuras demasiado pesadas. Es de desear que encuentren una forma diferente de zanjar las diferencias entre las dos formas de concebir el ideario de la Orden y la fraternidad entre Masones entre sí y con las Masonas. Dicho esto, para mí resulta claro que las aguas fluyen hacia la Masonería liberal y adogmática en el siglo XXI. 😎 ¿Porque crees entonces que la mujer debe tener el derecho a ser Masona? R. No es cuestión de creencia. Los derechos son inherentes a la condición humana, sin distingos de género. Es un hecho histórico comprobado que ha habido mujeres en la Masonería desde la época de los gremios de constructores, y no veo porque deba haber discusión en ello. El que lo niegue tiene un cierto problema personal. Sin embargo nadie puede negar que exista la discriminación por razón del sexo al interior de la Orden Masónica, no siendo una cuestión de creencias personales sino una manifestación más del patriarcado que relegó a la mitad de la humanidad a un segundo plano. Afortunadamente el patriarcado Masónico está limitándose a los límites de sus feudos, y ya no es un tema de la Masonería universal sino solo de quienes lo practican. Habiendo afirmado lo anterior, también debo dejar sentado que reconozco que los Masones y las Masonas tienen el derecho a optar por autoconstruirse Masónicamente en Logias formadas por personas de su mismo sexo aun en el evento de que tengan una orientación sexual diferente como suele suceder en la práctica. Está de por medio también la libertad de asociación. Uno no puede llamarse liberal y progresista sino reconoce en el otro el derecho a escoger libremente la modalidad del método Masónico que desee. Lo malo no es que existan Grandes Logias o Logias exclusivamente Masculinas o femeninas, no debemos hacer de la mixticidad un dogma. Lo inaceptable es que se haga discriminación por razón del sexo. Y en este sentido, la violación de los Derechos Humanos, si me permites la expresión, es un “crimen de lesa Masonería”. 9) ¿Cuál sería la definición a tu entender sobre la regularidad Masónica en este siglo? R. Mira Juan, “Regular” es toda organización Masónica o no que sigue una “Regla” fundacional. En el caso de la Masonería Especulativa, esa “Regla” está representada por las Constituciones de Anderson de 1723. Toda Gran Logia que las observe es “Regular”. Y, dicho sea de paso, para mí, la piedra capital de esta normativa es el mandato de “unir lo que está disperso”. No lo digo yo ni es una opinión de alguien que yo conozca. Es la Masonería que algunas Grandes Logias se niegan a practicar basadas en exigencias diplomáticas de relacionamiento que fueron impuestas por las coyunturas geopolíticas del siglo XIX y XX, y que han generado lealtades contrarias a la libertad, la igualdad y la fraternidad entre los Masones, Masonas, Grandes Orientes y Grandes Logias. Estas circunstancias subordinantes, emanadas unilateralmente de la Gran Logia Unida de Inglaterra y de las Grandes Logias anglosajonas de Estados Unidos, so pretexto de una “regularidad” que solo ellos dispensan, se observan con mayor relieve en la Masonería de los países en vías de desarrollo de Latinoamérica, África y Asia. En Europa continental la Masonería mayoritariamente no acepta condiciones ni certificaciones. Es un buen ejemplo. 10) ¿Crees que es correcto las actuales diferencias entre Masones dadas a la interpretación de la Constitución de Anderson? R. En mi experiencia personal me he topado con discusiones sobre las Constituciones de Anderson entre Hermanos que solo se han leído un par de párrafos de ella, o se encuentran atrincherados en una frase que acomodan a su personal pensamiento y querencia. Eso no es correcto. Sin embargo, creo que como están las cosas es una obligación moral de cada Masón estudiar con sana crítica y libre examen el texto de esas Constituciones, enmarcándolas en su contexto histórico y luego compartir sus reflexiones con otros que también las hayan estudiado. La Orden ganaría muchísimo en sensatez si hacemos de la instrucción y el librepensamiento una herramienta adicional de construcción moral Masónica. 11) Entonces ¿Cómo definirías la doctrina de la Masonería? R. En mi concepto, aunque la Masonería posee una doctrina, las Grandes Logias no deben adoctrinar. Es algo sobre lo que hay que tener mucha claridad. La doctrina Masónica indaga en las fuentes de donde fluye su método constructivo, estudia su historia y desenmaraña el significado de sus símbolos, con el objeto de comprenderla en toda su amplitud, buscando con ello incitar en el Masón la elaboración de proyectos y modelos autobiográficos autónomos. El adoctrinamiento busca un pensamiento único, que es exactamente lo contrario de lo que busca la doctrina Masónica. 12) Tú sabes que nos creen anticlericales… ¿Cómo ves la relación de la Masonería con las religiones? R. Entiendo que hay muchas personas anticlericales en todo el mundo, dentro y fuera de la Masonería. Yo en lo personal no soy anticlerical, ni antirabino, ni antimulah, ni antilama, ni anti Willaq Uma, ni…. Y no veo porque deban ser conflictivas las relaciones entre la Masonería y las religiones si cada una de estas instituciones se dedica a lo suyo. Lo ideal es que haya armonía en la diversidad social. Muchas Grandes Logias y Grandes Orientes en aplicación de un pensamiento laico se pronuncian públicamente a favor del respeto a la dimensión personal religiosa y defienden lo público como un lugar común de convivencia. 13) Entonces Iván, ¿por qué esa obsesión contra nosotros por satanizarnos? R. Es una neurosis que hace que el “satanizador” que la padece si no lo tomara contra los Masones lo haga contra cualquier otra cosa. Pienso que es un tema de psiquiatras, aunque reconozco que es molesto el dale que dale con que algunas expresiones religiosas catequizan en el miedo al enemigo que seriamos nosotros para mantener unido al rebaño en torno al líder o a la organización. De todos modos, he notado que el entusiasmo inicial en contra de la Masonería se les va diluyendo en la misma medida en que nos estudian. 14) ¿Cuál debería ser el papel a desempeñar de la Masonería en la sociedad actual? R. En resumen categórico: Constructivo de valores y principios. 15) ¿Entre tantas diferencias que comparten las Grandes Logias de distintos países qué es lo que les une a todas ellas? R. Muchas cosas. Por ejemplo que quieren estar constituidas por personas de buenas costumbres, que inducen a sus miembros a desarrollar un corazón generoso, a ser ciudadanos útiles y a ser ejemplos de vida para los demás, También poseen en común un lenguaje de símbolos basado en las herramientas de los antiguos constructores, la arquitectura moralizada, un referente solar en sus decoraciones Logiales y un largo Etc. Son muchas más las cosas que comparten las Masonas y Masones que las que imponen las divisiones y fronteras internas de la Orden. 16) ¿En tu opinión que cosas deben mejorarse en torno a la Masonería, si considera que las hay? R. Superar las divisiones. Ya es hora de dejar la necedad y de estarle haciendo el mandado a otro. Es un problema que el pueblo Masónico desea superar de una vez por todas. Antes de terminar algunas preguntas sueltas y con respuestas cortas para que te conozcan un poco más nuestros lectores. ¿De qué Equipo de Futbol es don Iván Herrera Michel? La verdad es que aunque jugué durante muchos años de mi vida, no soy hincha de ningún equipo de fútbol ni voy al estadio. Me gusta ver el buen fútbol por televisión, y si el partido es malo cambio de canal. ¿Tu Comida preferida? Cuando inventaron la comida fusión ya en el Caribe la comíamos. Un plato nuestro trae aportes de la gastronomía indígena, europea, africana, árabe y oriental. Tenemos recetas del Magreb hechas con maíz en vez de trigo, como la arepa de huevo, o una variedad local de la butifarra blanca catalana a la que en mi ciudad le echamos tres gotas de limón. Es una mezcla que resultó de 500 años de inmigración y nos acostumbró el paladar a que todo combina con todo si es los componentes individualmente son sabrosos. Si me colocas en el problema de elegir entre una parrillada uruguaya, un ceviche peruano, un ropa vieja cubano, un churrasco argentino, una cazuela de mariscos del Caribe o una pizza callejera de piña, pollo y champiñones en Barranquilla, para citarte unos pocos platos irresistibles para mí, te contesto como decimos en el Caribe con confianza “échame, por favor, un poquito de cada uno”. Ojalá algún día pruebes la delicia que es el jugo del corozo rojo que se produce en mi tierra. ¿Lugar de Colombia que te gustaría vivir? Definitivamente Barranquilla, aquí tengo todo lo que más valoro en mi vida, mi familia, mis amigos, mi rincón preferido, mi Logia, Etc. ¿País del mundo que te gusta? Muchos. Ni los nombro. A algunos los conozco a otros todavía no. Tu país Perú, por ejemplo, es de una belleza comparable a la de Colombia por la riqueza de sus cordilleras, mares, selvas amazónicas, valles, ríos caudalosos, música, etc. Pero eso no quiere decir que no quiera conocer la Antártida un día de estos. Ahora bien, debo confesarte que más que países y hacer ecoturismo que disfruto mucho, tengo un gran interés en conocer etnias. ¿Libro que motivó tu vida? Fíjate Juan que tuve la inmensa suerte de nacer en una familia a la que el Niño Dios el 24 de diciembre, junto con el balón de fútbol, el trompo y el carrito de policía, le traía libros de literatura universal, de cuando los grandes hombres eran niños, de aventuras, de descubrimientos, Etc., por eso no tengo un libro que me haya marcado en especial sino un conjunto de libros que me hicieron soñar en un mundo que después descubrí que se parecía al que propone la Masonería. De todos modos, cada edad tiene su libro. ¿Te consideras un hombre de derecha, izquierda o centro políticamente hablando? Moderado, que es como decir de centro, ecléctico o que sé yo. A la derecha le admiro su apuesta por la iniciativa privada y a la izquierda su preocupación por lo social. ¿Iván herrera se ve en algún momento como Alcalde o Congresista en Colombia? Definitivamente NO. ¿Lo que más quieres en la vida? Mi familia y mi tranquilidad. Y como decía platón: una biblioteca que dé a un jardín. ¿Que haces cuando no estás trabajando o haciendo Masonería? Mi esposa dice que nunca dejo de trabajar y de hacer Masonería. Pero eso es mentira. Mis hijos dicen que siempre estoy aconsejando. Pero eso también es falso. Soy un hombre casero y de familia. Me gusta mucho el cine en casa, Mafalda, los Simpson, Sheldon Cooper, Les Luthiers, vagar sin rumbo por Youtube, cambiar los canales de TV cada vez que sale una propaganda, la comida callejera con mis hijos, leer la prensa por internet, ojear unos tras otros libros viejos de mi biblioteca, sentarme a la mesa sin saber que comida hicieron, dormir temprano. ¿Qué libro desearías escribir y que nombre le pondrías? Quisiera escribir un libro que se titulara “Historia de la Unión de la Masonería Universal” , pero que no fuera de ciencia ficción. QH:. Iván Herrera, en nombre de FENIX te agradezco esta entrevista que nos has concedido dado tu apretada agenda personal y Masónica ¿Quisiera añadir algo? Gracias a ti Juan por lo que estás haciendo por la Masonería de habla hispana. Muchas gracias. Un fuerte abrazo a todos los Masones del Perú en donde tengo grandes recuerdos, enseñanzas e inmejorables Hermanos. Un día como hoy

V Congreso de Potencias Masonicas - Guadalajara Mexico - I:.P:.H:. Victor Salazar Soto 99°

V Congreso de Potencias Masonicas - I:.P:.H:. Victor Salazar Soto 99° Guadalajara Mexico

American Diplomatic Mission Of International RelaTiones _ Diplome de Lerite . Victor Salazar Soto


 

American Diplomatic Mission Of International RelaTiones _ Diplome de Lerite . Victor Salazar Soto

I:.P:.H:. Victor Salazar Soto - Centro de Estudios Masonicos Internacional - Alquimia y Astrologia


 

I:.P:.H:. Victor Salazar Soto - Centro de Estudios Masonicos Internacional - Alquimia y Astrologia

Supremo Consejo Hermetico Hispano de Norteamerica - Gran Comendador Victor Salazar Soto 33° U.S.A. New York


 

Supremo Consejo Hermetico Hispano de Norteamerica - Gran Comendador Victor Salazar Soto 33° U.S.A. New York

Bienvenido Ilustre y Poderoso Hermano Victor Salazar Soto, 100° Es un honor contar con vos como Gran Ministro de Cultura Masónica de la Gran Dieta Hermética Mixta Internacional.

Bienvenido Ilustre y Poderoso Hermano Victor Salazar Soto, 100°

 Es un honor contar con vos como Gran Ministro de Cultura Masónica de la Gran Dieta Hermética Mixta Internacional. Sin duda alguna vuestra luces y conocimientos darán realce a los quehaceres masónicos mixtos en beneficio de las Hermanas y Gran Dieta Hermética Mixta Internacional Hermanos esparcido por la faz de la tierra. ¡Por el triunfo de la Luz sobre las Tinieblas!... Es cuanto. FRATERNALMENTE “Por una Humanidad con Luz" M∴R∴G∴M∴ I∴P∴H∴ GREGORIO PALAFOX PALAFOX 33°, 95° LA GRAN SECRETARIA I∴P∴H∴ NATALIA LUNA LÓPEZ 33° EL GRAN DIPUTADO I∴P∴H∴ FREDDIE G. WASHINGTON 30°, 66°, 90°, 95°, 99° Ver menos

SIMBOLISMO DEL MANDIL MASÓNICO

SIMBOLISMO DEL MANDIL MASÓNICO De BELINO. 
Gentileza de B. ORTIZ 

Al recibirlo lo imprimimos en nuestra memoria como el primer presente que de la Masonería recibimos es el primer símbolo sobre el que recibimos una explicación y la primera evidencia tangible para el iniciado de que ha sido admitido en nuestra augusta orden. Nunca será tanto el avance que tengamos en los estudios de los sagrados misterios como para poder relegar el mandil a un segundo plano quizás cambiando su forma y sus ornamentos conservará ese honroso título el cual se le dio a conocer al Masón en un principio en la noche de su iniciación. Desde el principio de las civilizaciones muchos pueblos usaron el mandil como símbolo místico. En Persialos Mithas investían al candidato a ser iniciado con un mandil blanco. Entre los israelitas por ejemplo se encuentra el cíngulo o ceñidor formando parte de la vestidura del sacerdocio. En las iniciaciones Brahamanicas practicadas en el Indostán se usa una especie de faja sagrada denominada Zennar. La secta judía de los Esenios vestía a sus novicios con un manto blanco. Tal reminiscencia surge en la voz del poeta Alfonso Sierra Madrigal al referirse a Jesús el adepto como: "El blondo esenio de blanca vestidura". Kaempfer refiere que los japoneses practican ciertos ritos de iniciación revistiendo a sus candidatos con un mandil blanco sujeto alrededor del cuerpo. Esta costumbre proviene de la creencia antigua multireligiosa y extendida de que el asiento de los instintos animales es la región hipogástrica y por lo tanto debe cubrirse y protegerse en pos del pulimento espiritual.El mandil masónico debe ser de color blanco ya que ese color es el emblema de la pureza y el candor y por esta razón este color debe ser preservado. En cuanto al material de que está hecho el cordero siempre ha sido considerado como símbolo de la inocencia. El mandil del masón debe ser de piel blanca de cordero. Ninguna otra sustancia puede sustituir sin destruir por completo el carácter del símbolo. Las antiguas liturgias de iniciación contemplaban el decirle al neófito al tiempo que se le entregaba el mandil: "Por la piel del cordero os recordamos la pureza de la vida y la rectitud de vuestra conducta que son tan esencialmente necesarias para poder ser admitido en la logia celestial superior donde el Supremo Arquitecto del Universo preside toda la eternidad". Entonces el verdadero mandil del Masón debe ser de piel de cordero de 14" a 16" de ancho con 12" o 14" de alto con babeta de 3" o 4" de alto. Cuadrado y sin adornos de y adornados con lentejuelas son una innovación de nuestros hermanos franceses los cuales no se contentan con la simplicidad y la sencillez lo cual los ha llevado a decorar profusamente sus mandiles contagiando al resto del universo masónico y desvirtuando así uno de los símbolos más fuertes de la Masonería. Ha sido para algunos motivo de tanto orgullo el hecho de portar el mandil que los hermanos de las logias de Inglaterra se refieren a él como: "La condecoración más alta más antigua que el Toisón de Oro o Águila Romanay más honorable que la Estrella o la Jarretera.En cuanto a la manera de llevarlo los aprendices Masones lo deben llevar con la babeta levantada simbolizando así el anhelo de crecer espiritualmente con el alma apuntando a las alturas. En el grado 33 del rito escocés antiguo y aceptado los hermanos que lo poseen están dispensados de portar el mandil pues para ellos "El trabajo ha terminado". Cuando el mandil de adhiere al cuerpo se sostiene por una cuerda la cual forma un circulo con respecto al cuerpo simbolizando el espíritu de Dios. El triángulo de la babeta representa el alma Masónica en un triángulo cuyos tres vértices significan: Tres hechos vitales: Salud Dinero y Amor. Tres cosas que defender: Honor Hogar y Patria. Tres cosas que controlar: Carácter Lengua y Conducta. Tres hechos porque luchar: Libertad seguridad social y tranquilidad familiar. Tres cualidades que estimar: Rectitud Valor y Gratitud. Tres hechos que meditar: Vida Muerte y Eternidad. Tres hechos que evitar: Pereza Barbarie e Ignorancia. Tres hechos que admirar: Voluntad Dignidad y Lealtad. Tres hechos que adoptar: Libertad Igualdad y Fraternidad. El ignorante grita el inteligente discute y el sabio calla. Sabiduría Fuerza y Belleza. Salud Fuerza y UNIÓN. El cuadrado representa nuestro cuerpo (la tierra la materia y la esencia). Uniendo estos tres significados tenemos presente en el mandil la representación del hombre en alma espíritu y cuerpo. El conocimiento profundo del simbolismo del mandil ayudará al Masón en su formación teológica y espiritual y dará lugar al estudio más profundo del simbolismo. Sirva pues esta humilde recopilación de la sabiduría vertida por tanto ilustre hermano como una invitación que un servidor os hace al estudio y la meditación pues por esos medios estoy seguro que creceremos como Masones y como seres humanos y por añadidura lograremos el engrandecimiento ante los ojos del mundo de nuestra augusta institución Masónica simbolismo del mandil masónico The apron and its symbolism Simbolismo del Mandil Masonico "Recibid este mandildistintivo del Masón y más honroso que todas las condecoraciones humanas porque simboliza el trabajo. Única fuente de salud del saber de la virtud y de la riqueza. Os da derecho a sentaros entre nosotros y sin el nunca deberéis de estar en logia". Con estas solemnes palabrasel Venerable Maestro ciñe al neófito el mandil de aprendiz Masón. Blancolimpio inmaculado y alto como sus ideales. Distintivo de quienes deseosos del conocimiento sanos y virtuosos pretenden alcanzaran la mayor de las riquezas: la elevación espiritual. Este símbolo representa para todos los francmasones un fuerte sentimiento de afinidad con nuestros hermanos

La Madre viuda ENVIADO POR ESTHER PAREDES NAVARRO

La Madre viuda 
ENVIADO POR ESTHER PAREDES NAVARRO 

Es una historia complicada. En realidad todas estas historias tienden a hacerse bastante complicadas. Pero Isis y su marido Osiris eran mellizos, hijos de la diosa Nut. Y sus parientes más jóvenes eran Seth y Nephthys, que también eran mellizos hijos de Nut. Una noche, Osiris durmió con Nephthys, creyendo que era Isis... un despiste, digamos. De ese error nocturno nació Anubis, el hijo mayor de Osiris, pero de la esposa que no debía ser. Seth, su marido, se lo tomó mal y planeó matar a su hermano mayor, Osiris. En secreto tomó las medidas de Osiris y mandó hacer un hermoso sarcófago en el que cupiera exactamente. Una noche, cuando los dioses celebraban una animada fiesta, Seth vino con el sarcófago y declaró que cualquiera que cupiera exactamente lo tendría como regalo para su tumba. Todos los presentes probaron y, por supuesto, cuando Osiris entró, el sarcófago cumplía exactamente su medida. Inmediatamente aparecieron setenta y dos cómplices que bajaron la tapa, la ataron, y lo arrojaron al Nilo. Así que lo que tenemos aquí es la muerte de un dios. Y cada vez que se produce la muerte de un dios, puedes esperar una resurrección. La muerte de Osiris estaba asociada simbólicamente con las crecidas e inundaciones anuales del río Nilo, que fertilizaba todos los años la tierra de Egipto. Era como si la putrefacción del cuerpo de Osiris fertilizara y vitalizara la tierra. Osiris fue flotando Nilo abajo hasta ser depositado en una playa, en Siria. Creció allí un árbol hermoso, de maravilloso perfume, que incorporó el sarcófago a su tronco. El rey de aquella región acababa de tener un hijo varón y se disponía a construir un palacio. Y como el aroma de ese árbol era tan maravilloso, lo hizo cortar y llevar para hacer el pilar central del salón principal del palacio. Mientras tanto, la pobre diosa Isis, cuyo marido había sido arrojado al Nilo, emprendió la búsqueda de su cadáver. Este tema de la búsqueda de Dios, esposo del alma, constituye un tema mitológico principal en ese periodo: la Diosa sale en busca de su esposo y amante perdido y, gracias a la lealtad y a un descenso al reino de la muerte, se convierte en su redentora. Isis llega por fin al palacio y se entera de la existencia de la columna de madera aromática. Sospecha que puede tener algo que ver con Osiris, y consigue empleo como nodriza del niño recién nacido. Bueno, deja que el niño le chupe un dedo... después de todo, es una diosa, y hay un límite a las concesiones que pueden hacerse. Pero se encariña con el niñito y decide darle la inmortalidad poniéndolo en la chimenea para quemar su cuerpo mortal. Como diosa, puede impedir que el fuego lo mate, ya entiendes. Y todas las noches, mientras el niño está en el fuego, ella se transforma en golondrina y vuela lúgubremente alrededor de la columna en la que está encerrado su marido. Una noche aparece la madre del niño en el cuarto donde se desarrolla esta pequeña escena, ve al niño en la chimenea, suelta un grito, que quiebra el encanto, y el niño tiene que ser rescatado de la incineración. La golondrina, en tanto, se ha transformado otra vez en la bella nodriza y diosa, que explica la situación y le dice a la reina: «A propósito, es mi esposo el que está ahí, dentro de esa columna, y le agradecería que me lo dejara llevar a casa». Así que el rey, que entretanto ha aparecido en escena, dice: ¡Pues claro! Por supuesto". Hace extraer la columna, se la entrega a Isis, y el hermoso sarcófago que contiene a Osiris es depositado sobre una barcaza principesca. En el camino de vuelta al delta del Nilo, Isis quita la tapa del ataúd, se acuesta al lado de su marido muerto, y concibe un hijo. Se trata de un tema que aparece todo el tiempo en las antiguas mitologías bajo muchas formas simbólicas: de la muerte viene la vida. Cuando la barcaza toca tierra, la diosa da a luz entre los papiros a su hijo Horus; y fue la figura de esta madre divina con su hijo concebido de dios la que dio origen al modelo de la Virgen Madre y viuda. El pájaro en vuelo, es un símbolo casi universal del espíritu. Con la madre viuda en tanto ésta concibe mediante el espíritu, sí. Pero aquí nos encontramos con un pequeño detalle más. El hermano menor, Seth, celoso, mientras tanto ha usurpado el trono de Osiris. No obstante, para asumir propiamente el poder, debería casarse con Isis. En la iconografía egipcia, Isis representa el trono. El faraón se sienta sobre el trono, que es Isis, como un niño sobre el regazo de su madre. Por eso, cuando estás delante de la catedral de Charteres, puedes ver sobre uno de los portales de la fachada oeste una imagen de la Virgen como el trono sobre el cual se sienta el niño Jesús y bendice al mundo como su emperador. Es precisamente la imagen que nos ha legado el más antiguo Egipto. Los primeros padres y los primeros artistas imitaron deliberadamente estas imágenes. Las mitologías esotéricas a las que se refieren aquí son las del dios muerto y resucitado: Hiram, Cristo, Adonis, Gilgamesh, Osiris, uno tras otro. La muerte y resurrección del dios está asociada en todas partes con la luna, que muere y renace todos los meses. Durante dos noches y tres días está oscura, y por eso tenemos a Cristo dos noches y tres días en la tumba. Nadie sabe cuál puede haber sido la fecha real del nacimiento de Jesús, pero se ha tomado la fecha que era la del solsticio de invierno, el 25 de diciembre, cuando las noches empiezan a hacerse más cortas y los días más largos. Es el momento del renacimiento de la luz. Fue exactamente la fecha de nacimiento del dios persa de la luz, Mithra, el Sol. Esto sugiere que hay una idea de muerte del pasado y nacimiento del futuro en nuestras vidas y en nuestro pensamiento: muerte de la naturaleza animal y nacimiento de la espiritual. Esos símbolos nos están hablando en ese sentido. Por eso Isis ó Balkis la madre viuda del Sol puede decir: "Soy la que es la madre naturaleza, madre de todas las cosas. Señora de todos los elementos. Dueña de los poderes divinos, reina de todo lo que está en, el infierno, pero principal entre todos los que habitan el paraíso. Manifestada sola y bajo una única forma entre todos los dioses y diosas. El asno de oro, de Apuleyo, siglo II d.C. El asno de oro es una de las primeras novelas que se han escrito. Su principal personaje, su héroe, ha sido transformado, por lujuria y magia, en un asno símbolo de la brutalidad animal, y tiene que superar una ordalía de dolorosas y humillantes aventuras hasta que su redención le viene por gracia de la diosa Isis. Ella aparece con una rosa en la mano símbolo del amor divino, no de la lujuria, y cuando el asno come la rosa recupera su antigua condición de hombre. Pero ahora es más que hombre, es un hombre iluminado, un santo. Ha experimentado el segundo nacimiento virginal, ya sabes. De modo que de la mera carnalidad animal se puede pasar a una muerte espiritual y renacer. El segundo nacimiento es de una encarnación exaltada, con forma espiritual. Y la diosa Madre Viuda es la que produce todo esto. El segundo nacimiento se lleva a cabo mediante una madre espiritual. Notre Dame de París, Notre Dame de Chartres... nuestra Madre Logia etc. Renacemos espiritualmente entrando y saliendo de una Logia Masónica. Ahí reside un poder exclusivo del principio secreto femenino. También puedes acceder al renacimiento por intercesión del sexo masculino. Pero usando este sistema de símbolos, la mujer es la regeneradora. La tradición Masónica propiamente es una reunión de la idea de las antiguas escuelas milenarias, del Héroe como alguien que ha de unir los poderes espirituales y temporal, y la idea clásica, helenística, de Hiram muerto y resucitado, y que renace en cada masón, como un hijo meramente espiritual. MASONES DE LA LENGUA ESPAÑOLA NEW YORK. VICTOR SALAZAR

La hermandad de la serpiente. G:.M:. Víctor Salazar Soto 100°.

La hermandad de la serpiente. 
 G:.M:. Víctor Salazar Soto 100°. 

 La serpiente simboliza la curación física, la magia, el cocimiento de las leyes y la sanación física por medios espirituales. Su origen de la hermandad de la serpiente se origina en Sumeria, su fundador fue Enki; Dios del agua. Sumeria, Acadia y Babilonia. Los Naasenos serpiente. Los Setianos, hijos de Adan no nacidos de Eva. Los Cainitas - Tubal Cain Hiran Abiff - Abraxas Los Encratitas - Taciano Neoplatónico Los Bardesanes - Valentín el Gnóstico. Abrazaron mediante algunos ritos su iniciación hacia los misterios egipcios de Isis, tenían mucha similitud a la hermandad de la serpiente de Mesopotania, las órdenes Ofitas o hermandad de la serpiente. Publicadas por victorsalazar144

miércoles, 21 de mayo de 2025

Porqué y para qué soy Masón

Porqué y para qué soy Masón Soy masón porque quiero ser digno de aprender los principios de la masonería. En mi mente está presente la eterna cuestión de ¿Qué me reserva el porvenir?. Así como a todo buen masón, a mí también me asalta la eterna ansiedad de conocer la luz. Ese constante anhelo de alcanzar lo inalcanzable, lo que llevamos dentro y que no hemos encontrado aún. Considero que a partir del simbolismo comienza el conocimiento de la paz, la armonía, de la alegría. De la satisfacción y el perfeccionamiento. Alcanzar todas estas cosas que están contenidas en el corazón humano, es la gran obra, el conocimiento del hombre y del G.".A.".D.".U.". Quiero establecer la diferencia entre lo alegórico, lo simbólico, lo científico y lo religioso que pudiera haber en la Orden masónica. Quiero comprender la diferencia entre lo místico, lo real y lo espiritual. Al ser iniciado masón se me ofreció La Luz. Considero que está a mi alcance. Esa Luz es el conocimiento. Soy masón porque quiero labrar la piedra bruta de la ignorancia. Esa carga que hace que prevalezca la oscuridad, que se restrinja la civilización, la causante de la inmoralidad, la pobreza y el crimen. Considero que la Institución masónica ha trasmitido a través de las edades el conocimiento de las artes y las ciencias. Ha sido persistente en el combate de los vicios, ahondando pozos sin fondo a las pasiones y levantando columnas a las virtudes. Soy masón porque considero que la masonería es una Institución moral establecida por hombres virtuosos con el loable propósito de imprimir en nuestras mentes y corazones las mas sublimes verdades, porque está fundada en el amor fraternal, en la justicia, la fortaleza, la prudencia y la templanza. Porque es un maravilloso ejemplo de moralidad ilustrado con símbolos. La verdad es el centro, el punto de donde irradian directamente a sus miembros el completo conocimiento del G.".A.D.".U.. Porque es una Institución fundada en la razón y la verdad, eterno fín de la civilización del linaje humanos. Soy masón porque quiero destruir mi ignorancia, porque no quiero ser como un zángano ciego caminando en la oscuridad. Soy masón porque habiéndose sembrado en mí la duda, quiero encontrar la verdad oculta en mí mismo, quiero encontrar la causa de todos los efectos Termina el trabajo con un axioma hindú, que dice: Aquel que ignora y no sabe que ignora, es un insensato, ¡Huye de él!. Aquel que ignora y sabe que ignora es sencillo, ¡Instruidle!. Aquel que sabe e ignora que sabe, está dormido ¡Despertadle! Pero aquel que sabe y que comprende que sabe, es un sabio, seguid sus pasos. Yo quiero seguir los pasos de los sabios, mis HH.". Mayores. He aquí porqué y para qué soy Masón

Soberano Santuario Internacional Mempis Misraim para los Estados Unidos de Norteamerica - G:.Hierophante Victor Salazar Soto 100°

Soberano Santuario Internacional Mempis Misraim para los Estados Unidos de Norteamerica G:.Hierophante Victor Salazar Soto 100°
Soberano Santuario Internacional Mempis Misraim para los Estados Unidos de Norteamerica

R:.L:.S:. Shemsu Hor N.02 Oriente de USA. Valle de New York - Queens.

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R:.L:.S:. F:. Shemsu Hor N.02 Oriente de USA. Valle de New York - Queens.

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LAS PEQUEÑAS GRANDES LOGIAS: ¿DEBILIDAD O FORTALEZA PARA LA MASONERÍA? Por Iván Herrera Michel

Por Iván Herrera Michel LAS PEQUEÑAS GRANDES LOGIAS: ¿DEBILIDAD O FORTALEZA PARA LA MASONERÍA? (Palabras pronunciadas en el Segundo Simposio Masónico “Francmasonería en la Modernidad” organizado por la Gran Logia Universal de Mixta de New Jersey, los días 20 y 21 de septiembre 2013 (E:. V:.) Por Iván Herrera Michel Uno de los más llamativos comportamientos de la Masonería de finales del siglo XX y de comienzos del XXI, lo constituye la aparición en todas partes del mundo de Grandes Logias, Grandes Orientes, Federaciones de Logias, Supremos Consejos del Rito Escocés Antiguo y Aceptado, Capítulos Generales del Rito Francés, Santuarios del Rito Memphis, Etc., de no más de unos 300 miembros agrupados en un máximo de 15 Logias, con un presencia muy activa en la radio, la televisión, la prensa y el Internet. Al parecer lo mediático les atrae, sobre todo para hacer público que son una Masonería fraternal, amable, que sus Templos no tienen telarañas, que se ocupan de los problemas actuales, que son personas de buenas costumbres, que es verdad que creen en la libertad, la igualdad y la fraternidad hasta el extremo de haber proscrito, en gran parte de su seno, la discriminación contra la mujer, que lo Masónico es una opción admirable, que respetan las creencias de todos, que son ciudadanos comunes y corrientes, que no quieren tener conflictos con otros Masones, que no les importa mucho lo que decidan en Londres, París o Washington, ni aceptan jefes que les impongan obligaciones ajenas a la doctrina Masónica. Estas nuevas opciones, aunque todavía minoritarias en número de miembros con respecto Izq. a Der. SGC Adriano Medina, GM Benjamín Sabido, Víctor Salazar a las de mayor antigüedad de su localidad, cuentan con un gran “empoderamiento”, buscan adquirir sus propias edificaciones, poseen una economía de autoabastecimiento, se les nota inclinación general al estudio y la discusión abierta, y cada vez es mayor la influencia que poseen en el cambio del imaginario de la Orden en la sociedad en general. En América, esa realidad contrasta con la caída en la membresía de las Obediencias de donde eran originarios sus fundadores. Y la razón es sencilla: encarnan los sueños de varias generaciones de Masones de a pie de practicar un determinado estilo de Masonería, de acabar los caudillismos y de contar en lo organizacional con una democracia más participativa. Hoy vemos que el mensaje de estas nuevas Obediencias está llegando con mucha fuerza a profesionales, comerciantes y segmentos de la clase media que antes estaban poco penetrados, y de donde proceden muchos de sus nuevos Iniciados. Además, existe una demanda de socializar alrededor de valores humanistas que no se identifica con lo que ven en la Masonería de corte anglosajón y optan por un ambiente más liberal y progresista, posibilitando la aparición de diferentes perfiles que cubren más amplios sectores de la sociedad. Es muy difícil poder contar cuantas Grandes Logias han nacido después de la segunda guerra mundial. Es posible que algo tenga que ver esta expansión con la distención social y la incorporación de la mujer al mercado laboral que siguió al conflicto bélico. El surgimiento de una nueva generación con un concepto más definido de la autonomía y de la autorrealización, pudo también ayudar a debilitar la concepción de que la disciplina institucional está por encima de la doctrina Masónica, y apoyar la idea de que siempre es posible crear una nueva Gran Logia. En este orden de ideas, uno se sorprende de la cantidad de Obediencias que trabajan sin mayores aspavientos y con mucho fervor, tratando de hacer las cosas bien y de que la fraternidad entre sus miembros sea una realidad. Las más conocidas son las que asisten a encuentros plurales y predican en Internet con mucho entusiasmo su existencia, pero la verdad es que muchas están pasando desapercibidas, porque poseen estrategias no tan invasivas para mostrar la vida Masónica como un camino que sigue siendo contemporáneo y abierto a todos, siempre y cuando el accionar personal tenga sustento moral sólido. La dinámica del surgimiento de nuevas Obediencias Masónicas se ha intensificado, porque a la par de mantener una raíz común con la historia y la filosofía de la Orden, ha promovido la práctica de la protección mutua con vínculos de solidaridad e inclusión, además de la afabilidad entre sus miembros en un ambiente general de transformación valórica del tejido familiar y social. Jersey City (Nueva Jersey) vistos desde Battery Park en Nueva York No hay que menospreciar el fenómeno, porque más que una atomización de la Orden, el grueso de las pequeñas Obediencias que existen obedece al empuje de lo que hoy podríamos llamar, usando un término de reciente cuño, los “indignados” de la Masonería. En efecto, al igual que en el movimiento ciudadano surgido en España y propagado por muchos países que conocemos desde el año 2011 como de los indignados, estamos frente a unos Masones que se organizaron luego de protestar pacíficamente en sus Obediencias de origen en la búsqueda de una versión más coherente de Masonería, alejada de personalismos, falsa división de poderes y segmentaciones antifraternales. Las nuevas Obediencias, por lógica más pequeñas que las anteriores, se distinguen más por su manera de accionar que por un cambio drástico en sus doctrinas, a las que de todos modos asumen con una visión más liberal. Naturalmente, deseo dejar sentado a estas alturas que me refiero a lo que se define a partir de un proyecto serio y bien intencionado, y no a las aventuras de diversos plumajes o con interés comercial que en ocasiones encontramos. El movimiento, que comenzó con una concepción muy localista, a partir de desencuentros específicos que buscaban la recuperación de la trasparencia del espacio Masónico, con el pasar de los años ha puesto en contacto entre sí a sus exponentes y se ha ido redibujando la geopolítica Masónica en la medida de que sus confederaciones, Coloquios, Simposios, Etc. representan, hoy en día, una fuente doctrinal importante como resultado de poder tratar libremente ciertos temas de interés general, así como un conglomerado a tener en cuenta por los grandes actores del panorama Masónico mundial. En este orden de ideas, en un hecho claramente visible, los miembros de este grupo han terminado creando plataformas para encuentros abiertos y proyectos colectivos sin afiliación institucional o subordinación alguna, pero conservando la intención indeclinable de sostener un diálogo respetuoso con todos, que termina siendo también una fuente de inspiración pro movilización en lugares en donde las diferencias aún no se concilian fraternalmente, o el ejercicio del poder se considera absolutista. En el Simposio, con el GM puertorriqueño Edgar Mtnez. y la IPH:. Ayda Perez Pareciera que los indignados de la Masonería que crean nuevas Obediencias, desean un cambio y un futuro más fiel a los principios generales de la Orden que garantice la igualdad de todos los Masones para acceder a los Grados, enseñanzas y Dignidades, y una jurisdicción que destierre de la vida Masónica a los embaucadores, así como una fraternidad que garantice por lo menos una buena amistad. La inmensa mayoría de los líderes de las Grandes Logias históricas no han querido escuchar a los indignados locales, ni a los miles de Masones y Masonas que reclaman la abolición y el cambio en las normas injustas y discriminatorias, y los vicios que han permeado a la Orden en su interacción con las sociedades profanas. Tampoco, incluyen en sus grandes citas un punto del Orden del Día para tratar un tema que se les ha escapado de sus manos. Es una verdadera política de avestruz que niega el cambio que ya se presentó en la implantación universal de la Masonería. La baja en la membresía y en las Iniciaciones, son apenas un par de indicadores de cómo han ido perdiendo presencia social. De hecho, el aumento y la mayor diversidad Masónica son fenómenos frecuentes en sociedades más abiertas y plurales, y cerrarse a esta realidad implica la pérdida de los miembros que rechazan sus posturas conservadoras arrogantes, al tiempo que se dan cuenta que “su” Masonería es una más entre otras, y no “la” Masonería, como estaban convencidos de que eran antes de que el Internet le contara a la Aldea Global la verdad de la institucionalidad Masónica. Son varias las cosas buenas que se observan en la práctica en el accionar de las Obediencias pequeñas. La comprensión, la conformidad, la oportunidad y la proximidad entre sus miembros hacen que los debates sean eficaces. Y de todos modos, una Obediencia de las llamadas chicas se divide también obligatoriamente en otros subgrupos que son las Logias, en las que ya sobre la marcha general posee reflexiones con presupuestos más participativos y dificultades fácilmente conciliables, y los debates sobre los contenidos con los que se quiere trabajar fluyen más allá de convertirse en un decálogo de buenas intenciones al momento del debate grupal. Mediante este ejercicio, cuando los temas importantes pasan a consideración del plenario central ofrecen la oportunidad de ayudar a la Obediencia a alejarse de la comodidad vegetativa y a aceptar los cambios y los desafíos con que el contexto social reta al método Masónico de construcción personal y colectiva de reasignificación y reubicación personal. Con los IIHH:. Víctor Salazar y Juan Orrego, en un descanso de los trabajos QQ:. HH:., Sabemos que en la Masonería existe una alta movilidad de personas que llegan y se van pronto de las Logias. A algunas la experiencia, aunque sea corta, les sirve para resituarse en relación con los otros y para asumirse como protagonista principal de su propia vida. Para trabajar la empatía y a hacerle visible diferentes formas de construir una realidad personal y social. Con frecuencia, resaltamos esta experiencia, desde grandes y pequeñas Obediencias. Tampoco, es patrimonio de ninguna de ellas el sugerir en exclusiva una articulación constructiva entre lo personal y lo grupal, ni el proponer en el marco de lo ritual una reflexión sobre la reciprocidad entre lo instintivo, lo emocional inconsciente y la racionalidad consiente, así como sobre su rol Iniciático en lo que hacemos. No es cuestión de cuanto duramos asistiendo a una Logia. Para quienes permanecemos en ella por un lapso mayor, un punto importante es definir que seguimos haciendo allí. Y el tema no es fácil, porque, naturalmente, depende de que deseemos hacer cada uno de nosotros en la Masonería. Es decir, que a diferencia de otras organizaciones, en la Masonería sus efectivos más antiguos no necesariamente tienen la obligación de enseñar, aunque sí la de ayudar a transferir la Tradición Masónica, que es un proceso muy distinto y más colmado de incertidumbres y de complejidad. En el Rito Escocés Antiguo y Aceptado decimos que tenemos que llevar “orden desde el caos”, que es algo parecido, y a ello no le podemos atar una particular dimensión temporal ni un necesario guarismo de Masones dedicados a la labor. La construcción de un tejido fraternal desde las Logias se tiene que presentar en modelos de participación Iniciática y en la adopción y aceptación de las diferentes formas de conducirse en las interacciones Masónicas. La comunicación y la trasmisión de la tradición instituyen el desarrollo integral de los Masones, con lo que se fortalece la adopción de adecuadas maneras de pulimento de la Piedra Bruta. Comite Organizador del Simposio En un área mayor, las Obediencias de pocos miembros tienden a actuar de manera cooperativa, y se favorece el que la fortaleza de la fraternidad dependa de la acción de cada Masón y de su sentido de pertenencia. En este camino, se observa que comprometen su accionar en la solución de dificultades relacionadas con la equidad, la reciprocidad y la observancia de los principios generales de la Masonería. En principio, yo aconsejo que los conflictos que de tarde en tarde crean tensiones en las Grandes Logias obstaculizando su gestión administrativa, su cohesión fraternal y su devenir Iniciático, se solucionen por las vías del diálogo y el consenso. La observancia de una estructura democrática con separación real de poderes puede ayudar mucho a superarlos. No obstante, todos sabemos, que hay un momento en que se torna incompatible la coexistencia en una misma Obediencia, sobre todo cuando hay mayorías que se oponen por inercia, temor o interés personal a practicar una Masonería de buena calidad y prefieren un estatus quo poco Masónico. En estos casos, soy un decidido partidario de que lo mejor para los Hermanos y para la Masonería es fundar una nueva Gran Logia, y en este sentido la aparición de nuevas Obediencias es una oportunidad para la Orden. Y no hay que preocuparse mucho por ello, porque en honor a la verdad históricamente comprobada, y aunque parezca un contrasentido, desde 1717 en que se fundó la primera Gran Logia en Londres, la Masonería siempre se ha multiplicado dividiéndose. Muchas gracias, Queridos Hermanos.

EL SIMBOLO Y EL RITO MASONICO DE LA CADENA DE UNION

EL SIMBOLO Y EL RITO MASONICO DE LA CADENA DE UNION FRANCISCO ARIZA La cadena de unión es sin duda alguna uno de los símbolos más significativos de entre todos los que decoran la Logia masónica. Se trata de un cordel que rodea todo el templo por su parte superior. Esta situación en lo "alto" le da una connotación celeste, confirmada por los doce nudos que aparecen de trecho en trecho a lo largo de todo el cordel, los cuales simbolizan los doce signos del zodíaco. Esos nudos se corresponden, además, con las doce columnas que excepto por el lado de Oriente también rodean el recinto de la Logia. Cinco de esas columnas están situadas en el lado de Septentrión, otras tantas a Mediodía, y las dos restantes -las columnas J y B- a Occidente. Cuadro simbólico de la Logia. Grado aprendiz Para comprender esta simbólica habría que tener en cuenta que la Logia es, ante todo, una imagen del mundo, y como tal debe existir en ella una representación de lo que constituye el "marco" mismo del cosmos, que es propiamente el zodíaco. Muchos recintos o santuarios sagrados -al igual que las ciudades edificadas según las reglas de la arquitectura tradicional-, siendo la proyección en la tierra del orden celeste, están de una u otra manera "enmarcados" por las constelaciones zodiacales. Es el caso, por ejemplo, del Ming-Tang chino, del Templo de Jerusalén (y su arquetipo la Jerusalén Celeste), de muchas fortalezas templarias, y en construcciones tan antiguas como puedan ser el crómlech megalítico de Stonehenge. Asimismo, los masones operativos, y en general los artesanos constructores de cualquier sociedad tradicional, se servían de un cordel para determinar la posición correcta de los templos o catedrales, que siempre y de forma invariable, estaban orientados según las direcciones del espacio señaladas por los cuatro puntos cardinales, exactamente igual que la Logia. Ahora bien, como menciona René Guénon "... entre las funciones de un 'marco' quizá la principal es mantener en su sitio los diversos elementos que contiene o encierra en su interior de modo de formar con ellos un todo ordenado, lo cual, como se sabe, es la significación misma de la palabra 'cosmos'. Ese 'marco' debe pues, en cierta manera, 'ligar' o 'unir' esos elementos entre sí, lo que está formalmente expresado por el nombre de 'cadena de unión', e inclusive de esto resulta, en lo que a ella concierne, su significación más profunda, pues como todos los símbolos que se presentan en forma de cadena, cordel o hilo (todos ellos símbolos del eje) se refieren en definitiva al sûtrâtmâ".1 Por consiguiente, la cadena de unión masónica vendría a significar, considerada desde el punto de vista metafísico, exactamente lo mismo que la "cadena de los mundos": un símbolo que resume el conjunto de todos los estados, seres y mundos que conforman la manifestación universal, los cuales subsisten y están ligados entre sí por el "hilo de Atmâ" (sûtrâtmâ), es decir por su hálito o espíritu vivificador. Por otro lado, la cadena de unión es también la cuerda anudada (o houppe dentelée) que aparece figurada en los "cuadros de Logia" masónicos, y concretamente en los pertenecientes a los grados de aprendiz y de compañero. La significación simbólica de dicha cuerda es idéntica a la de la cadena de unión, pero, al mismo tiempo, y vinculado específicamente con el simbolismo del cuadro de Logia, habría que considerar también otro aspecto importante de ella: el que tiene como función "proteger", además de "unir" y de "ligar", los símbolos y emblemas que aparecen dibujados en el cuadro, el que es considerado como un espacio sacralizado, y por tanto inviolable. En este sentido, la idea de "protección" está incluida en el simbolismo de los nudos y las ligaduras, que por sus formas respectivas recuerdan el trazado de los dédalos y laberintos iniciáticos. En la simbólica universal, el laberinto, además de estar relacionado con los "viajes" y las pruebas iniciáticas, también tiene como función la defensa y protección de los lugares sagrados o centros espirituales, impidiendo el acceso a los mismos a los profanos que no están cualificados para recibir la iniciación. Pero la defensa se extiende igualmente (y podríamos decir que principalmente) a impedir el acceso a las influencias sutiles del psiquismo inferior, el que por su carácter especialmente disolvente representan un claro peligro que ha de ser controlado y evitado a toda costa, pues por medio de esas influencias se introducen determinadas energías maléficas y caóticas destinadas a destruir, o en el mejor de los casos a debilitar, a los propios centros espirituales y a las organizaciones tradicionales ligadas a ellos, y consecuentemente a impedir en lo posible la comunicación con las influencias verdaderamente superiores, de las que esos centros y organizaciones han sido -y son- precisamente el soporte. Y al hilo de esta última reflexión, quizá no estaría de más señalar los peligros de disolución (o de petrificación, pues para el caso es lo mismo) que en la actualidad acechan a la Masonería, ya que es a todas luces evidente que esta organización tradicional se ha visto sometida a una paulatina extirpación de la dimensión iniciática y esotérica de sus símbolos y sus ritos. Y lo que es tal vez más lamentable es que esa acción ha sido llevada a cabo muchas veces por masones que no han comprendido que es precisamente gracias a esos símbolos y ritos (revelados en el origen y transmitidos a lo largo del tiempo) que la Orden masónica adquiere su pleno sentido, pues ellos constituyen sus señas de identidad, lo que dicha Orden es en sí misma, y no podría dejar de ser, a menos de quedar totalmente desvirtuada y vacía de contenido esencial. Para que esa situación no llegue a ser irreversible, pensamos que se hace necesario que los masones de espíritu tradicional (esto es, aquellos que consideran que la Masonería pertenece y es una ramificación de la Tradición Primordial y por tanto una vía de realización al Conocimiento) restituyan de nuevo el sentido cosmogónico y metafísico de su legado simbólico-ritual, empezando por considerar que la cadena de unión es, efectivamente, el "marco" celeste que delimita, separa y protege el "mundo de la luz" del "mundo de las tinieblas", lo sagrado de lo profano. Síntesis simbólica del grado de compañero Además de la cuerda anudada que rodea la Logia y el cuadro, existe un rito en la Masonería que también recibe el nombre de cadena de unión. Se trata de aquel que está constituido por el entrelazamiento que forman las manos, con los brazos entrecruzados, de todos los integrantes del taller, lo cual, precisamente, tiene lugar alrededor del cuadro de la Logia y de los tres pilares de la Sabiduría, la Fuerza y la Belleza momentos antes de clausurar los trabajos. En primer lugar, habría que decir que la cadena de unión es uno de los ritos masónicos que más directamente aluden a la fraternidad masónica, la que, en efecto, está sustentada en los lazos de armonía y concordia que entre sí ligan a todos los masones. De ahí el por qué a los nudos de la cuerda también se les denomine "lazos de amor", pues el amor, entendido por lo más alto, es la fuerza que concilia los contrarios y resuelve todas las oposiciones en la unidad del Principio. Dicha fraternidad representa, por tanto, el fundamento mismo sobre el que se apoya la propia organización iniciática y tradicional. En este sentido, el entrelazamiento de manos y brazos configura una trama cruciforme que evoca la imagen de una estructura fuertemente cohesionada y organizada. Pero este rito se realiza, fundamentalmente, para dirigir una plegaria o invocación al Gran Arquitecto, siendo en esa invocación donde reside su sentido profundo y su razón de ser. Por ello, prescindir de la plegaria como sucede en muchas logias actuales, por el mero hecho de ignorarla o por considerarla un trasnochado anacronismo, provoca inevitablemente el empobrecimiento del propio rito, quedando éste, en consecuencia, reducido prácticamente a casi nada. Sin embargo, en la antigua Masonería operativa, la plegaria y las invocaciones de los nombres divinos formaba parte constitutiva del rito y de los trabajos simbólicos; y precisamente ella se realizaba en la cadena de unión y alrededor del cuadro de la Logia, con lo cual se confirma el papel verdaderamente "central" que este último ha desempeñado siempre en la Masonería. Por lo general, la cadena de unión comienza y termina en el Venerable Maestro, y es él, como la máxima autoridad de la Logia, el que dirige la invocación al Gran Arquitecto. Veamos a continuación un ejemplo de ésta según es de uso todavía entre algunos Ritos masónicos que han seguido conservando parte del legado operativo: "¡Arquitecto Supremo del Universo! ¡Fuente única de todo bien y de toda perfección! 'Oh Tú! Que siempre has obrado para la felicidad del hombre y de todas Tus criaturas; te damos gracias por Tus paternales beneplácitos, y te conjuramos para que los concedas a cada uno de nosotros, según Tus consideraciones y según nuestras necesidades. Esparce sobre nosotros y sobre todos nuestros Hermanos Tu celeste Luz. Fortifica en nuestros corazones el amor hacia nuestras obligaciones, a fin de observarlas fielmente. Que puedan nuestras reuniones estar siempre fortalecidas en su unión por el deseo de Tu placer y para hacernos útiles a nuestros semejantes. Que ellas sean por siempre la morada de la paz y de la virtud, y que la cadena de una amistad perfecta y fraterna sea en lo sucesivo tan sólida entre nosotros que nada pueda alterarla. Así sea". Por consiguiente, y según se desprende de esta oración masónica, la unión encadenada y fraterna se convierte en el soporte horizontal y psicosomático (terrestre), sobre el que "descenderán" -estimulados por la plegaria- los beneplácitos (bendiciones) de la influencia espiritual o supra-individual -"Tu celeste Luz"-, posibilitando así una vía de comunicación axial entre el cielo y la tierra, o como se dice en lenguaje masónico, entre la Logia de lo Alto y la Logia de Abajo. Es decir, que a través de la invocación lo que se pretende esencialmente es la comunicación con las energías celestes (las Ideas o atributos creadores del Arquitecto universal) cuya acción espiritual ha conformado -y conforma permanentemente- la realidad simbólica, ritual y mítica (es decir, cosmogónica y metafísica) de la organización iniciática. Al mismo tiempo, en el rito de la cadena de unión se concentra la entidad colectiva constituida por todos los antepasados que realmente participaron en la Tradición y su conocimiento, y de los que se dice moran en el "Oriente Eterno" (la Logia celeste). Dicha entidad se hace una en comunión con sus herederos actuales, esto es, con los masones que, habiendo recibido y comprendido (en la medida que sea) el mensaje de su legado tradicional, contribuyen hoy en día a mantenerlo vivo y actuante. En este sentido, la cadena de unión también está simbolizando la cadena iniciática de la tradición masónica (y por analogía la de todas las tradiciones), cuyo origen es inmemorial, como lo es asimismo el mensaje que ella ha ido transmitiendo a lo largo del tiempo y de la historia. Las individualidades, o mejor, la idea de lo individual y lo particular que cada componente de la cadena pudiera tener de sí mismo, desaparece como tal para formar un solo cuerpo que vibra y respira a una misma cadencia rítmica. La cadena de unión deviene así un círculo mágico y sagrado donde se concentra y fluye una fuerza cósmica y teúrgica que asimilada por todos y cada uno de los integrantes de la misma les permite participar del verdadero espíritu masónico y de su energía salutífera y regeneradora. No es entonces de extrañar que durante el transcurso del rito de la iniciación, el neófito reciba simbólicamente la "luz" integrado en la cadena de unión, lo cual es perfectamente coherente en una tradición en la que el rito y el trabajo colectivo desempeñan una función eminente como vehículos de transmisión de la influencia espiritual. NOTA 1 Ver René Guénon, Símbolos Fundamentales de la Ciencia Sagrada cap. LXV. Ver menos