La Iniciacion en Mision Rahma

LA INICIACION EN MISION RAHMA -

 VICTOR SALAZAR

 RECORDANDO EL AYER QUE ES HOY, LA INICIACION 

A fines de los 77, la inquietud por la búsqueda de algo que nos confirme el camino de algo que cambie nuestra vida, la búsqueda de la luz, del conocimiento, y de saber que había algo más que llenara nuestro corazón y nuestro espíritu, nos llevó a un grupo de muy buenos amigos a unirnos en una sola idea: A esa búsqueda. Nuestro amigo, Jesús Cisneros, era parte de un grupo al cual llaman Misión Rahma. El vivía en el barrio, así como el resto de los muchachos. Éramos Juan Silva, José Rivera, Arturo Figuren (Yuki) Roberto Chiga, y yo, Víctor Salazar; éramos 6 grandes amigos, y luego se unió Carlos, hermano de Yuki, y con Carlos, también su señora Carmen. Jesús nos habló del grupo Rahma así que aceptamos que él fuera el instructor del grupo, que se llamaría Misión RAHMA - GRUPO DE SURCO. Nos reuníamos dos veces por semana en la noche a las 8:00 pm. No teníamos un lugar fijo de reunión, así que éramos errantes, así había días que nos reuníamos en la casa de Yuki, pero sus hermanos nos miraban como si fuese raro lo que practicábamos, todas esas cosas de los “hermanos guías” era algo así como decían en aquellos tiempos, la nota platillera.De modo que nos reuníamos en el techo del edificio donde vivía Carmen a las 8.00 pm. Como todos vivíamos en Santiago de Surco (LIMA – PERÚ) y nuestro barrio en la cercanía es Fernando Fautor, donde pasamos gran parte de nuestras vidas, cuando llegaba la noche, nos reuníamos y nos encaminábamos a donde Carmen. Ahí nadie nos molestaba, y trabajábamos tranquilos nuestras practicas. El clima era favorable para las reunions, aunque Carmen sacaba de su casa algunas frazadas por si acaso hiciera frío. En la reuniones no faltaban confirmaciones de avistamientos, lo cual Jesús nos decía que los hermano guías estaban con nosotros, y eso llenaba nuestros corazones de alegría, Todo empezaba, primero con la Gran Invocación, una oración que era como el Padre Nuestro,y luego los mantras Rahma, y tres veces Amar así como tres veces el Om (el sonido en que vibra el universo), que lo repetíamos con un tono alargado con una inhalación visualizando una luz amarillo brillante profunda y cuando exhalábamos pensábamos que sacábamos todo lo negativo de nuestros SER, de nuestro cuerpos, espíritu mental y físico. El instructor dirigía la práctica del día con un programa que se llevaba y estaba atento que todo estubiera bien y en armonía con los trabajos realizados, y luego se practicaba el ejercicio psicofísico mental de imaginación y visualización. Cada reunión era una práctica diferente que teníamos que practicar en casa. Cuando terminaba las prácticas, el instructor nos pedía que contáramos nuestras experiencias en el trabajo realizado, así que cada uno contaba lo que había experimentado en ese momento; algunos habían visualizados símbolos y otros sentían sensaciones de presencias y otros podían ver cosas en el ambiente. Luego se cerraba la reunión con una oración que era el Padre Nuestro. Los trabajos consistían en aprender a ver los cuerpos sutiles como el aura, el viaje mental, la salida astral y esto sucedía muy seguido en las reuniones también los psicofísicos, como recargar el cuerpo físico de energía y tratar de controlar nuestras emociones. Nuestra alimentación era vegetariana, ni cigarro, ni licor, pues tratábamos de vivir en armonía con todo lo que nos rodea y debo decir que no es tan fácil, pero uno debe intentarlo. Todo esto era nuevo para nosotros; el entusiasmo se apoderaba de nosotros y la amistad se transformó en una gran hermandad, que es tan fuerte con el tiempo que han pasado 25 años y nuestra hermandad aún vive en el más profundo amor y respeto a nuestra amistad. Luego Jesús que era el instructor, nos llevó a conocer a otros hermanos de otros grupos Rahma. Ahí estaban la hermana Ulda y su hija que se reunían en su casa en el centro de Lima. En su casa tuvimos algunas reuniones, así es que ellos vivirán sienpre en nuestros pensamientos y en nuestros corazones. En las reuniones el instructor siempre estaba atento, ya que se suelen abrir otros planos (dimensiones) he ingresar a nuestro plano otras entidades no deseadas en nuestras reuniones. Camino a la iniciación Rahma. Recuerdo que era un sábado, luego de terminar en mi trabajo, eran como las 3.00 pm, y estaba en Surquillo, yo había llevado mi mochila al trabajo con todo el equipo ya que pasaría una noche fuera de casa. Mi padre y yo trabajábamos en el mismo lugar así es que me despedí de mi padre JOSE SALAZAR. El nunca fiscalizó mi forma de ser pues siempre confió en su vástago, aunque en aquel tiempo éramos rebeldes en algunas cosas pero siempre sin hacer daño a nadie, era ése el tiempo del pelo largo, del rock y todas esas cosas. La reunión seria en la playa de Ventanilla, yo no sabía ni tenía idea de cómo ir y llegar, solo tenia la referencia de tomar el carro que te lleva a Ventanilla y que te deje en el kilometro tal….el carro salía de la Plaza Dos de Mayo en Lima (Perú), claro que estaba un poco asustado pues era algo nuevo y de no encontrar el lugar sería un caos, pero ese día seria muy especial en muestras vidas para todo el grupo de Surco, y mis hermanos Rahma Surco ya habían salido temprano con los otros grupos así que ya estaban allí, en la playa de Ventanilla donde se estaba llevando la tenia de aniversario e iniciación de algunos grupos Rahma. Así es que al llegar a la Plaza Dos de Mayo en el Centro de Lima (Perú) , pregunté cómo llegar a cada persona que pasaba, así finalmente llegué a la parada del ómnibus que llevaba a Ventanilla aún un poco temeroso, subí a la unidad vehicular y le pedí al chofer que por favor me dejara en el kilómetro acordado. En el camino le pedía a los hermanos guías que me ayudaran a que pudiera llegar, y fué un viaje largo y de ruta desconocida, al final, cuándo el chofer me indicó que debía bajar aquí en el kilometro CERO, así lo llamaré, y cuando bajé del ómnibus me pregunté : “y ahora que hago, y dónde está la playa”. Cuando miré al frente y ví en el piso una señal, era felizmente el dibujo de una estrella Rahma que había sido pintada con yeso blanco y una flecha que indicaba el camino a seguir. Así que sentí una inmensa alegría, y seguí el camino y cuando el camino se dividía en dos, había una estrella con una flecha en el piso así que llegué como a las 6.00 pm. Ya los grupos estaban trabajando desde la mañana, y los coordinadores se acercaron a los grupos para coordinar los trabajos y enseguida el coordinador nos pidió nuestro nombre y apellido en una lista que era para los nombres cósmicos. Luego nos llevaron al centro de la reunión y formamos un círculo con las manos y palmas mirando arriba, y este era para la recepción de los cristales de celcio y el paso xendra. Los coordinadores podían ver cómo se formaban los cristales de celcio en la palma de nuestras manos y ellos sabían cuando ya se habían recibido en ese mismo momento se dió lo que se llama el paso xendra, que es una cúpula de energía creada artificialmente, y es como una puerta dimensional que nos traslada a otros lugares, aunque en cierto momento no somos consientes del momento en que sucede, pero escuchaba a los coordinadores decir que se estaba dando las tres iniciaciones, el nombre cósmico, los cristales de celcio, y el paso xendra. Luego de pasar la iniciación, el coordinador nos dió las pautas a trabajar con el nombre cósmico y los cristales de celcio. Éste fue el momento que cambió nuestra vida, ya ahora tenía un propósito. Los grupos trabajaron toda la noche, algunos hermanos habían llevado sus guitarras, formados en grupo con una fogata prendida cantábamos las canciones que estaban de moda en aquellos días, así como algunos hermanos se retiraron a descansar. Poco a poco fué amaneciendo, este definitivamente era un día diferente y especial para los que estuvimos allí. Al poco tiempo nos juntamos con otro grupo que era de Barranco, y allí estaba Mónica y sus hermanos carnales Sofía, Carlos Soto que se unió, Alejandro y una hermana muy querida que está en la gloria del creador. Así que nos llamanos EL GRUPO, SURCO –BARRANCO, Misión RAHMA. A los hermanos que en un momento de su vida sintieron un llamado, y que sintieron que la vida en este mundo no es solamente levantarse, comer, y hacer vida social , o vivir para trabajar y dormir, sino que hay algo más grande en todo esto, algo que en el inicio no lo entiendes y que es como un olorcito dulce, algo que impregna en tu ser y tiende a ser una necesidad, como que algo no encaja con tus ideas, hasta que, en un momento lo entiendes, pero que no lo puedes explicar, porque es algo que nació y se desarrolló contigo, y que lo descubres a través de tu propia experiencia porque eres parte del todo. El profundo gran amor, pues eres parte importante de la creación, y que estás unido a todo y que eres parte de todo, y que tu vida tiene un propósito, que es el de evolucionar hacia una vida mejor, pero cuando llegue tu momento y estés listo para mover tu punto de encaje, entonces decidirás si cruzas la puerta, y ese será tu punto de reflexión, de si te quedas en la puerta mirando lo que hay adentro, y que de repente vez que alguien entra corriendo y te dice, caliente o frio. Tuya es la decisión. Para mas informacion :